Ayuso amplía la prohibición del móvil en la escuela al uso individual de ordenadores y tabletas

Ayuso amplía la prohibición del móvil en la escuela al uso individual de ordenadores y tabletas

La Comunidad eliminará de sus colegios a partir del curso que viene el uso individual de dispositivos digitales para el alumnado de Educación Infantil y Primaria y en Secundaria lo deja al albur de los centros; la patronal de la escuela concertada religiosa dice que la medida atenta contra la libertad y pluralidad educativa

María del Mar Sánchez, investigadora: “En la escuela ponemos el foco en prohibir los móviles, pero nos olvidamos de educar”

La Comunidad de Madrid prohibirá el curso que viene “el uso individual de dispositivos digitales en alumnos de Educación Infantil y Primaria”, según ha anunciado el Gobierno regional a través de una nota. Traducido: se amplía a ordenadores, tabletas o cualquier otro dispositivo el veto a los móviles ya vigente. En Secundaria esta medida quedará al albur de los centros educativos, exactamente igual que sucede ahora con los teléfonos.

“Se vuelve a la esencia de la educación adaptada a los tiempos de hoy, a los libros, a los dictados y a la caligrafía, que haremos compatible con que los alumnos tengan destrezas digitales”, ha explicado el consejero de Presidencia, Miguel Ángel García, tras el Consejo de Gobierno, aunque no ha explicado cómo se combinarán ambas cuestiones.

El futuro decreto del Gobierno regional “establecerá que los alumnos de Infantil y Primaria no podrán trabajar de forma individual con dispositivos digitales, y sus maestros tampoco podrán programar la realización de deberes u otras tareas académicas en las que tengan que utilizar tablets, ordenadores, móviles o similares fuera del horario escolar”, amplía la nota enviada por el Ejecutivo que preside Isabel Díaz Ayuso. Los centros educativos que ya tengan algún programa en marcha tendrán otro curso más de moratoria.

La medida, anunciada por la Comunidad entre calificativos como “pionera” o “primera en España”, se enmarca en la batalla que tiene la mandataria contra la tecnología en la escuela –fue de las primeras en prohibir su uso– y tiene letra pequeña, según admite la propia Comunidad.

Escuelas Católicas (EC), la patronal de la iglesia que controla los centros concertados religiosos, ha criticado la medida a través de una nota, y lo han hecho cargando donde más le duele a Ayuso, acusándola de cercenar la libertad de elección de las familias, una de las máximas que más le gusta esgrimir a la presidenta a la hora de defender su apuesta por la escuela concertada. “Es una medida taxativa que se contradice con los principios de libertad, pluralidad y calidad de enseñanza postulados por la Comunidad de Madrid y que, sin duda, preocupa enormemente a los 340 centros que conforman la red de Escuelas Católicas de Madrid, al ver vulnerado su derecho a desarrollar un proyecto educativo propio y, sobre todo, elegido libremente por las familias”, sostiene EC, que representa a uno de cada seis centros de la red sostenida con fondos públicos de la región.

Dos horas semanales

La nota difundida por el Gobierno regional amplía algo los detalles que incluirá el decreto. “En cuanto al uso compartido entre dos o más alumnos, se permitirá siempre con una finalidad pedagógica, bajo la supervisión de los docentes y con limitaciones de tiempo en función de las edades y etapas. Así, en el segundo ciclo de Educación Infantil (niños de 3 a 6 años) y en los dos primeros cursos de Primaria, este manejo compartido estará restringido a una hora semanal”, explica.

Para el alumnado de 3º y 4º ese uso compartido se amplía a hora y media y los de 5º y 6º podrán llegar hasta las dos horas semanales. Por último, añade la Comunidad de Madrid, el decreto contemplará excepciones. “Aquellos alumnos con necesidades específicas de apoyo que requieran de estos recursos digitales, previo informe psicopedagógico, podrán utilizarlos sin ningún tope horario. Y también se permitirá su uso en las materias optativas o proyectos en los que sean imprescindibles para adquirir competencias específicas”.

Hace un año que el Ministerio de Educación recomendó a las comunidades autónomas que vetaran el uso del móvil en Infantil y Primaria, una medida que muchas ya tenían vigente, que divide al profesorado y que, en sus máximos de prohibición total, no tiene respaldo científico. La OCDE, en un análisis posterior a la última edición de PISA, sugirió que un uso moderado es positivo: “La OCDE no recomienda la prohibición generalizada, más bien invita a los países a desarrollar políticas que permitan que los estudiantes hagan un uso adecuado y moderado en la escuela con la finalidad de aprender”, según explicó Daniel Salinas, analista de la OCDE y uno de los autores de la prueba.

A Isabel Galvín, responsable educativa de CCOO en Madrid, la medida le plantea más preguntas que respuestas. “Se está planteando que en la escuela no se puedan usar ordenadores ni tabletas. Si no se usan y se aprenden a usar en el colegio, ¿se usarán fuera? ¿Quién saldrá beneficiado de esta medida? ¿No supone ampliar la brecha y la desigualdad social y los desequilibrios?”, deja en el aire.