Adelante Andalucía elige como candidato a las autonómicas a José Ignacio García, azote del presidente Moreno en la Cámara

Adelante Andalucía elige como candidato a las autonómicas a José Ignacio García, azote del presidente Moreno en la Cámara

La Asamblea Nacional del partido andalucista que fundó Teresa Rodriguez ha designado al diputado y portavoz de su grupo parlamentario como candidato a la presidencia de la Junta, tras una votación por unanimidad y sin ninguna lista en contra

El futuro de Adelante Andalucía sin Teresa Rodríguez: salto al Congreso sin la red de Yolanda Díaz

Adelante Andalucía ha elegido este domingo a su candidato a la presidencia de la Junta en las próximas elecciones autonómicas: el diputado y actual portavoz parlamentario, José Ignacio García, azote del presidente Juan Manuel Moreno en las sesiones de control al Gobierno.

García (Jerez de la Frontera, Cádiz; 1987) encabezaba la única lista que se presentaba en la Asamblea Nacional de Adelante, de la que ha salido elegido a la búlgara, esto es, por unanimidad de los 170 delegados que han participado.

La formación andalucista y anticapitalista fundada (y refundada) por Teresa Rodríguez tras su salida de Podemos, y su posterior ruptura con IU en una coalición anterior, afronta esta nueva etapa con el reto de consolidar su marca, su estructura orgánica, implantación territorial y su espacio político a la izquierda del PSOE.

Ya no es el fogonazo estelar de un Pablo Iglesias o la propia Rodríguez, que impactaron en la escena política con nombre propio, y sobre ellos se erigió la marca electoral morada. El camino de Adelante Andalucía es el ascenso natural -y empinadísimo- de un partido clásico en construcción, con la dificultad añadida de que el terreno de la política es hoy más firme para las propuestas ultraderechistas.

Adelante Andalucía tiene dos diputados en el Parlamento andaluz, lograron nueve concejales en las municipales de 2023, no obtuvieron representación en las generales de ese mismo año, y no se presentaron a las europeas. La Asamblea Nacional de Adelante Andalucía, celebrada este fin de semana en Cádiz, ha ratificado a José Ignacio García como cartel electoral, además de elegir a las personas que encabezarán las listas en el resto de provincias andaluzas.

Begoña Iza, profesora de Secundaria que ocupa desde hace unos días el escaño que dejó la exdiputada Maribel Mora tras su dimisión, será la número uno por Sevilla. Inmaculada Manzano por Granada, Mari García por Huelva, Alejandro Cabrera por Jaén, Luis Rodrigo por Málaga, Marivi Serrano por Córdoba y Diego Crespo por Almería.

En las elecciones autonómicas de 2022, que ganó por mayoría absoluta el PP de Moreno, Adelante Andalucía obtuvo 216.797 votos (el 4,58 % del escrutinio) y dos diputados en el Parlamento, donde forma parte del grupo mixto. Uno de ellos lo ocupó la entonces candidata y líder de la formación, Teresa Rodríguez, que abandonó la primera línea política al poco de iniciarse la legislatura para volver a su puesto de profesora en un instituto de Secundaria.

Su escaño pasó a manos de José Ignacio García, número dos por Cádiz, que desde entonces ha sido el principal referente de la coalición andalucista en la Cámara y el dirigente que da la réplica al presidente Moreno en las sesiones de control al Gobierno. Adelante Andalucía es la cuarta fuerza del Parlamento, por detrás del PP, PSOE, Vox y la otra coalición de partidos de izquierdas -Por Andalucía-, donde se integra IU y Podemos.

Fundación, escisión, refundación

En 2018, Adelante Andalucía nace precisamente como paraguas a todas esas formaciones progresistas a la izquierda del PSOE, bajo el hiperliderazgo de Teresa Rodríguez, secundada por el entonces líder regional de IU, Antonio Maíllo. Es la primera escisión política del Podemos de Iglesias, que siempre forcejeó con la dirigente gaditana para evitar que el partido morado cediese poder político, orgánico y económico a los territorios.

En 2021, Rodríguez refunda Adelante Andalucía tras una volcánica disputa con los partidos fundadores -Podemos e IU- y abre un nuevo camino para la coalición andalucista, en solitario, y bajo la hegemonía de su formación de origen: Anticapitalistas. Con esta estructura concurren a las autonómicas de 2022, disputando el espacio electoral de la izquierda tanto al PSOE como a la coalición Por Andalucía, marca de Sumar en esta región. La ruptura de Adelante Andalucía tiene muchas causas, pero una de las más significativas fue el rechazo visceral a formar parte del primer gobierno de coalición entre el PSOE y Unidas Podemos.

Los andalucistas hicieron campaña con un proyecto autónomos, acusando a sus antiguos socios de izquierdas de dejarse tutelar por formaciones de ámbito nacional. Estos, que llegaron a los comicios de 2022 a navajados en el seno de una coalición mal construida, acusaron el desgaste interno en las urnas, logrando apenas cinco diputados, el mínimo para tener grupo parlamentario. Adelante Andalucía obtuvo dos contra todo pronóstico, uno por Sevilla y otro por Cádiz.

En la presente legislatura, dominada por la mayoría absoluta del PP, ese grupo mixto de sólo dos diputados ha sabido exprimir al máxmo su representatividad en la Cámara, en las manifestaciones de protesta en la calle y en los medios de comunicación. Esta semana, la Mesa del Congreso ha tramitado una proposición no de ley del Parlamento andaluz para la gratuidad de las gafas para los niños -y bonificación para los adultos en función de la renta-, cuya autoría es Adelante Andalucía.

De performance a leyes al Congreso

El partido que pilota José Ignacio García, consciente de su fragilidad parlamentaria, ha buscado mecanismos para sacar la cabeza dentro de un debate político dominado por las grandes fuerzas, muy polarizado entre el PP de Moreno y el PSOE de Pedro Sánchez.

A veces con propuestas estrafalarias, que han crispado al presidente de la Cámara, Jesús Aguirre, como cuando el portavoz se llevó un melón al salón de Plenos para hablar del precio de las exportaciones de productos del campo andaluz; o cuando la exdiputada, Maribel Mora, virtió un bote de arena sobre el escaño del presidente de la Junta para denunciar cómo quedaría Doñana tras la polémica ley que amnistiaba regadíos ilegales junto al Parque Natural.

Adelante Andalucía se ha especializado en performance de este tipo, que luego han viralizado en las redes sociales, logrando que su mensaje trascendiera el limitado peso que tienen en la política andaluza. Pero también han sabido aprovechar el interés electoral del presidente Moreno por darles oxígeno en el Parlamento, apoyando algunas de sus iniciativas legislativas y aplaudiendo su autonomía de los otros partidos de izquierdas con sede en Madrid, consciente de que la división congénita en la base social progresista es una de las razones de su victoria en Andalucía.

En el reconocimiento público y los piropos que el presidente de la Junta ha concedido a José Ignacio García hay, claro, algo de estrategia política, pero Moreno se muestra sincero cuando describe a su rival como un portavoz “brillante” y “correoso”, o cuando destaca su libertad e independencia de las grandes formaciones de izquierdas, con sede en Madrid. “Usted y yo somos los únicos que verdaderamente podemos hablar con autonomía”, le ha espetado, alguna vez, cuando ambios dirigentes se han medido sus hechuras andalucistas.

A García, tanto los elogios del líder del PP como los apoyos de este partido a sus iniciativas, que han permitido prosperar iniciativas legislativas de peso -la citada ley de las gafas gratuitas- le obliga a dar más explicaciones de la cuenta. Es evidente, por pura aritmética parlamentaria, que sin el respaldo del partido con mayoría absoluta en la Cámara, un grupo con dos diputados no vería prosperar ninguna de sus propuestas.

Sin embargo, su peso político y legislativo está muy por encima de sus cifras, gracias precisamente a esa bomba de oxígeno que le ha brindado el PP. También es evidente que la principal motivación de Moreno es, claro, usar a Adelante Andalucía como ariete contra el PSOE y Sumar, socios de Gobierno en España, y su único rival en esta legislatura.

En la Asamblea Nacional de Adelante Andalucía ha participado Teresa Rodríguez y Pilar González, que fue candidata de la coalición en las últimas generales, aunque no salió elegida. González, líder del Partido Andalucista poco antes de su extinción, ha hablado de su partido como el de la “valentía y la alegría”.

En su discurso, José Ignacio García ha criticado con dureza el discurso de rearme militar que abandera el Gobierno de España y las principales instituciones europeas para dar respuesta a un nuevo orden mundial impuesto, a martillazos, por la nueva Administración norteamericana de Donald Trump. “Nos quieren con miedo y frente a esto nos quedamos con dos palabras, valentía y alegría; si nos tuvieran que definir la gente de Adelante es la gente valiente y alegre porque es la única forma de insuflar esperanza”, ha dicho.

“Alumbrar algo nuevo” es lo que espera José Ignacio García de Adelante Andalucía para las próximas elecciones ya que aspiran a “echar a la derecha sin volver atrás, queremos echar a quienes están dando lo público a la privada pero no poner a quienes inventaron las privatizaciones, queremos parar los recortes y alumbrar algo nuevo, queremos las dos cosas”, ha concluido.

El portavoz de Adelante siempre ha bromeado con los periodistas parlamentarios que siguen refiriéndose a su formación como “el partido de Teresa Rodríguez”. “No nos preocupa, no nos viene mal”, dice, sonriente. Desde que ocupa su escaño, ha consolidado su posición como parlamentario y referente de la oposición al PP de Moreno. Y ahora le toca ganarse esos galones fuera de la Cámara.