
El Euríbor se estanca en marzo cerca del 2,4% por la incertidumbre global
El valor del índice de las hipotecas de este último mes supone una rebaja media de 1.300 euros al año en las cuotas de los préstamos que se revisan cada año
Las “fuertes lluvias” traen la mayor caída de la inflación en dos años al 2,3% en marzo
El Euríbor se ha estancado en marzo cerca del 2,4% por la incertidumbre global, tanto por la guerra comercial como por la patada al tablero geopolítico mundial que ha dado el nuevo presidente de Estados Unidos, Donald Trump.
El valor del índice de las hipotecas de este último mes supone una rebaja media de 1.300 euros al año (casi 110 euros cada mes) en las cuotas de los préstamos que se revisan cada 12 meses. En marzo de 2024, el Euríbor cerró en el 3,72%.
La rebaja para las hipotecas que se revisan cada seis meses es algo inferior (43 euros al mes), porque el Euríbor se quedó en el octubre del año pasado algo por debajo del 2,7% (siempre de media de todo el mes). En estos ejemplos, se toma como referencia una hipoteca de 150.000 euros, a 25 años y contratada a tipo de interés variable con un coste que incluye el valor del Euríbor más un diferencial de un punto porcentual.
Las nuevas hipotecas y los nuevos préstamos también se abaratan respecto a meses anteriores, ya se firmen a tipo de interés variable o fijo, aunque en estos casos depende de las ofertas de los bancos. En los últimos días, el valor diario del Euríbor ha seguido cayendo, como se observa en el primer gráfico de esta información.
“Este mes, el Euríbor nos ha demostrado, una vez más, que no podemos hacer predicciones sobre su evolución porque, en una semana, puede cambiar mucho su tendencia. Este indicador está muy influenciado por lo que pase a nivel político, social y económico en Europa y, por eso, nos da estas sorpresas”, explica Simone Colombelli, director de Hipotecas del comparador y asesor hipotecario iAhorro.
En estos momentos, el impacto de los aranceles de Estados Unidos y de la respuesta de la UE en el crecimiento económico y la inflación es una incógnita, y tampoco está claro qué harán los bancos centrales. La próxima decisión del BCE será el Jueves Santo, el 17 de abril, tras recortar los tipos de interés oficiales 0,25 puntos, del 2,75% al 2,5%, en la segunda reunión ordinaria de su consejo de gobierno en 2025.
La de este mes de marzo fue la quinta bajada consecutiva del ‘precio’ oficial del dinero en la eurozona y la sexta desde junio, cuando estaba en el 4%, ante la moderación de la inflación, la debilidad del crecimiento económico y las necesidades de inversión, sobre todo en defensa.
Esta “relajación” de las condiciones de financiación estaba dentro de la hoja de ruta de la institución monetaria para dar oxígeno a la eurozona, donde España es la única excepción positiva. A partir de aquí, empieza un complejo debate sobre las siguientes decisiones del BCE con la guerra comercial y los efectos de los aranceles en la inflación, el crecimiento y el tipo de cambio euro/dólar como telón de fondo.
Los bancos aceleran la concesión de crédito a familias
Recientemente, el Banco de España confirmó que “los bancos están acelerando la concesión de crédito a familias y empresas con la bajada de los tipos de interés oficiales del Banco Central Europeo (BCE), y por tanto del Euríbor.
El abaratamiento de hipotecas y préstamos apoya la inversión de las empresas, el consumo de los hogares y facilita el acceso a la vivienda, pero también existe el riesgo de que recaliente unos precios de pisos y casas ya disparados.
“Los tipos de interés de las nuevas operaciones de crédito han mantenido un descenso gradual y generalizado por segmentos en los últimos meses, una tendencia que también se empieza a observar en el coste medio de los préstamos vivos [de los préstamos que ya estaban concedidos]”, explica el Banco de España en su último informe de previsiones económicas.
En el siguiente gráfico, se observa el abaratamiento del crédito desde noviembre de 2023, hasta enero de 2025. Una caída del coste de la financiación que es de un punto en total hasta enero para las hipotecas nuevas.
“La financiación a los hogares ha continuado acelerando su expansión en los últimos meses, con una contribución creciente de las hipotecas”, señalan el equipo de expertos del Banco de España que firma el informe. Las familias están aprovechando los préstamos más asequibles en este ciclo de bajadas de tipos para comprar viviendas.
El problema es que este estímulo para la demanda presiona unos precios que no han parado de elevarse en los últimos años, sobre todo en las grandes capitales y en los principales destinos turísticos, donde se acumula la mayor parte de la oferta de trabajo. Según los datos del regulador financiero, el “volumen” o montante de las nuevas hipotecas llegó a caer a 120.000 euros en 2023, desde donde ha ascendido hasta superar ligeramente los 160.000 euros en promedio.
“En cuanto a los precios [de la vivienda], la robustez que mantiene la demanda y las limitaciones a las que se enfrenta la oferta han seguido impulsando su dinamismo, hasta un crecimiento interanual del 11,3% a finales de 2024”, aseguran los expertos del Banco de España. Este es uno de los principales “cuello de botella” (una amenaza) para el consumo de las familias y para el crecimiento en general.