Los bomberos que vigilaban el Poyo sí que muestran su factura del día de la DANA: «Compramos comida porque pensábamos que pasaríamos el día»

La polémica desatada por las declaraciones del jefe del Cuerpo Provincial de Bomberos, José Miguel Basset, en la comisión de la Diputación de València, en las que afirmó que el pasado 29 de octubre a poco antes de las 15.00 horas se dio la orden de retirar al equipo de bomberos forestales que realizaban las labores de control del barranco del Poyo, en Chiva, porque el nivel del caudal bajó y tenían “ganas de comer”, sigue en aumento.

Tras hacerse públicas sus explicaciones, los bomberos forestales de la Generalitat Valenciana que durante la emergencia estaban bajo la coordinación del Consorcio Provincial, realizaron un comunicado conjunto en el que acusaban a Basset de intentar “tapar su incompetencia e irresponsabilidad” repartiendo culpas “con los de abajo”.

En medio de la indignación, la unidad de cinco efectivos que se encontraba en Chiva ha aportado a elDiario.es nuevos detalles con el objetivo de dejar claro que no abandonaron su puesto de trabajo para irse a comer. En concreto, han hecho público el ticket del supermercado de Chiva en el que se compraron algunos víveres: “Pensábamos que nos iba a quedar también toda la tarde controlando el nivel del barranco. Por eso, en un momento dado, la mitad del equipo se quedó en el punto de medición y la otra mitad nos acercamos al supermercado y compramos tres barras de pan rústico, agua y tortilla de patatas. Nos costó todo 11,56 euros”.

Sin embargo, en torno a las 15.00 horas les dieron la orden de retirarse a la base y de allí fueron enviados a casa. Dos horas más tarde, a las 17.00 horas, el barranco del Poyo se desbordó justo en la zona en la que estaban midiendo el caudal, inundando la población. Fueron estos bomberos, según aseguraron, los que por iniciativa propia salieron por la noche a ayudar en rescates de personas.

La publicación de la factura de la compra en el supermercado de Chiva contrasta con la opacidad del presidente del Gobierno valenciano, Carlos Mazón, quien aún no ha enseñado la de su comida en El Ventorro, con la excusa de que acudió como presidente del PP valenciano y como jefe del Consell.

El colectivo de bomberos que firmó el comunicado advirtió de que no va a tolerar “ningún insulto más”, y exigieron a Basset “que se retracte públicamente de las declaraciones realizadas”, algo que de momento no ha hecho.

Respondieron además que “el señor José Miguel Basset sabe perfectamente que en cada emergencia, cuando la situación lo permite, hacemos una parada técnica deprisa para comernos el bocadillo que nos dan y después continuar trabajando, ya que tenemos bien claro que la emergencia es lo primero y más todavía cuando hay vidas en peligro”. Así sentenciaron que “su obligación era mantener allá las unidades y proveerlas de avituallamiento, como así pasó en las lluvias ocurridas en Castelló hace un mes”.

Subrayaron también las responsabilidades que le correspondían a personas como este ex responsable del consorcio de bomberos: “Los responsables de determinar si vamos a una emergencia, si nos retiran o cuantas unidades trabajamos son personas como José Miguel Basset, que además, como responsable del Cecopi los días de la DANA, tenía toda la información necesaria y a todos los niveles para valorar correctamente la situación, o eso creíamos nosotros, ya que era su responsabilidad y obligación”.