
El palacio más grande del mundo que es Patrimonio de la Humanidad y fue encargado por un rey español
Fue inspirado en el palacio de Versalles y es máximo exponente del barroco italiano
El palacio de Segovia que une a las series ‘La vida breve’ y ‘Su majestad’
El mismo día que cumplía 36 años, el rey Carlos VII de Nápoles, quien más tarde sería Carlos III de España, colocaba la primera piedra del que sería su propio Palacio de Versalles, el 20 de enero de 1752. Así comenzaba la construcción del que se conoce como el Palacio Real de Caserta, a 40 kilómetros al norte de la ciudad de Nápoles, y que es actualmente Patrimonio de la Humanidad de la UNESCO, así como considerado el de mayor tamaño del mundo.
Carlos III y la construcción del Palacio Real de Caserta
En 1734, Felipe V cumplía con su objetivo de recuperar los territorios italianos que había perdido debido a la Guerra de sucesión, y cedía la corona de Nápoles y Sicilia a su hijo Carlos, que partía con tan solo 15 años para ser Carlos VII. Durante su reinado, se preocupó de dotar a la capital de las edificaciones públicas que merecía la corte, pero también quiso construir un palacio a la altura y se fijó en la moda que había impuesto el de Versalles.
Así fue como para el proyecto de construcción de un palacio inspirado en el de Versalles, y en parte también en el Palacio del Buen Retiro donde creció y en San Lorenzo de El Escorial, seleccionó a Luigi Vanvitelli, que había trabajado como arquitecto de estabilización de la cúpula de la Basílica de San Pedro del Vaticano y había intentado sin éxito ganar los concursos para la fachada de San Juan de Letrán y la Fontana di Trevi en Roma.
Luigi Vanvitelli no vería su principal obra terminada, pues fallecería en la misma localidad de Caserta en 1773, y sería finalizada por su hijo Carlo, que tuvo como ayudante a Francesco Sabatini, quien más tarde sería llamado por Carlos III para que fuera uno de los principales y más destacados arquitectos que modernizaron Madrid en el siglo XVIII.
El palacio real de mayor tamaño del mundo
El Palacio Real de Caserta es actualmente una de las máximas obras del barroco italiano y la residencia real de mayor tamaño del mundo con un total de 1.200 habitaciones en los 47.000 metros cuadrados y se construyó primero el acueducto Carolino basándose en la arquitectura romana para su abastecimiento.
El palacio cuenta con una altura de 36 metros, cinco pisos y en su interior alberga cuatro patios, con un total de 1.724 ventanas y un total de 34 escaleras, a los que se unen unos jardines de estilo renacentista con destacadas fuentes, bosques naturales e incluso una fábrica de seda en su recinto.
La visita al interior del Palacio Real de Caserta ocupa los apartamentos reales, entre los que destacan el acceso desde una imponente escalera de honor de 116 escalones de mármol blanco de Carrara, salas con frescos originales en sus techos, la biblioteca Palatina con más de 14.000 obras y una sala que alberga el belén que los Borbones instalaban cada año.
Durante la visita también se puede apreciar la habitación del Rey y diferentes aposentos, así como el majestuoso salón del trono en el que se pueden apreciar decoraciones en oro y una bóveda pintada al fresco sobre la escena de colocación de la primera piedra del edificio. Los fines de semana por la mañana se puede acceder al teatro de la corte, que se construyó en una fase posterior.
Por su arquitectura y características, así como su entorno natural, el Palacio Real de Caserta fue declarado Patrimonio de la humanidad de la UNESCO en 1997.