
El ex prior y defensor del cadáver de Franco, Santiago Cantera, abandona definitivamente el Valle de Cuelgamuros
Cantera se ha marchado del recinto como parte del ‘pacto no escrito’ que permitirá la resignificación del complejo y para asegurar la permanencia de la comunidad benedictina en la abadía y la basílica
Las víctimas de la dictadura califican de “continuidad franquista” la cesión del Gobierno a la Iglesia en Cuelgamuros
El Gobierno pacta con el Vaticano la resignificación de Cuelgamuros, incluida parte de la basílica
Estaba previsto, y pactado, pero hasta hoy no se ha producido. Santiago Cantera, el polémico ex prior del Valle, ya no se encuentra en Cuelgamuros. Tal y como ha adelantado Infovaticana y ha podido confirmar elDiario.es, Cantera ha abandonado el recinto, como parte del ‘pacto no escrito’ que permitirá la resignificación del Valle. Su salida era necesaria para asegurar la permanencia de la comunidad benedictina en la abadía y la basílica.
El relevo, como se confirma ahora, no era fruto de la ‘normalidad monástica’, como algunos quisieron vender al saberse que Cantera –historiador falangista y guardián del cadáver de Franco– se marcharía d Cuelgamuros, sino consecuencia lógica de la actuación antidemocrática del religioso, que se quiso convertir (algunos ya lo venden como tal) en el ‘mártir’ de Pedro Sánchez.
Atrás quedan la polémica exhumación de Francisco Franco, a la que Cantera se opuso, incluso físicamente, estando a punto de ser detenido por la Guardia Civil, o los intentos por desestabilizar el status quo del complejo, o las misas por el alma del dictador, o las objecciones a las exhumaciones de víctimas de la represión. Atrás, mucho más atrás, las candidaturas del religioso por la Falange, o su disposición a figurar como el ‘líder’ de la supuesta ‘rebelión católica’ contra el ‘Gobierno social comunista’.
Era una condición
Lo cierto es que la salida de Cantera era una de las condiciones para que los benedictinos pudieran quedarse en el Valle y para que se pudiera alcanzar un acuerdo para la resignificación de Cuelgamuros. Así, poco antes de que elDiario.es desvelara el acuerdo entre el Vaticano y el Gobierno a tal fin, se supo de la elección de Alfredo Maroto como sustituto de Cantera. Junto al fraile, se marcharán del complejo otros dos religiosos, de marcado corte franquista.
¿Cómo se ha gestado la salida de Cantera? “Ha sido muy difícil, con continuos bloqueos. Siempre que intentábamos algo, salía la fachosfera a boicotearlo”, señala una de las personas que han mantenido, desde julio del año pasado, una negociación a tres bandas entre el Gobierno, el Arzobispado de Madrid y la Secretaría de Estado de la Santa Sede. El objetivo era llegar a un acuerdo que permitiera cumplir con la Ley de Memoria Democrática en Cuelgamuros y que, a la vez, respetase el carácter sagrado de la abadía, que según fuentes de las conversaciones en ningún momento se planteó desacralizar, como tampoco estuvo sobre la mesa la demolición de la inmensa cruz que preside el valle. Algo que se alcanzó el 25 de febrero en una reunión entre el ministro de Justicia Felix Bolaños y el secretario de Estado vaticano Pietro Parolin, y que se confirmó el 4 de marzo con un canje de notas privadas entre el propio Bolaños y el cardenal Cobo, encargado por el Vaticano de ejercer como interlocutor en la materia.
En su día, el ministro de Justicia declaraba cómo “para el Gobierno es muy buena noticia que un prior que no comulgaba con los valores democráticos vaya a salir del Valle, en plena resignificación de ese monumento, en los 50 años de la muerte del dictador”.
No todos piensan lo mismo. De hecho, esta misma semana el siempre polémico obispo de Orihuela Alicante, José Ignacio Munilla defendía cómo Cantera “ha dado un paso a un lado voluntariamente… para que se salve la sacralidad de la basílica y la presencia de los monjes. Es un auténtico testimonio. Me parece maravilloso, potente y luminoso por la gracia de Dios”.
Para el obispo, “Santiago Cantera es el hombre que ha dado a España la lección moral que necesitaba. Porque mientras el mal de España consiste en supeditarlo todo con tal de aferrarse al poder […], el padre Cantera nos ha dado un ejemplo diciendo que, si conviene dar un paso para que el monasterio permanezca, lo hará. Es un testimoniazo”.
Toda la información en www.religiondigital.org