Lo último que faltaba en las guerras sucias de la política era una militante socialista que se creía Eliot Ness

Lo último que faltaba en las guerras sucias de la política era una militante socialista que se creía Eliot Ness

‘Política para supervivientes’ es una carta semanal de Iñigo Sáenz de Ugarte exclusiva para socios y socias de elDiario.es con historias sobre política nacional. Si tú también lo quieres leer y recibir cada domingo en tu buzón, hazte socio, hazte socia de elDiario.es

El Partido Popular ha convocado una manifestación contra el Gobierno para el 8 de junio en Madrid. Es la sexta de este tipo desde que Alberto Núñez Feijóo preside el PP. A la cita acudirán casi todos sus barones regionales, convencidos de que esta vez sí, esta vez dejarán patente la soledad de Pedro Sánchez. Ya ha anunciado su asistencia Carlos Mazón, del que ocho de cada diez valencianos han dicho en una encuesta de Prensa Ibérica que debería haber dimitido. Feijóo hará lo posible para que no le saquen fotos con él, pero lo tiene difícil. 

“Mafia o democracia”, dice el eslogan de la convocatoria. No os entusiasméis. No están pensando en la mafia política y policial que se montó en el Ministerio de Interior del Gobierno de Rajoy para hacer espionaje político a los rivales del partido. No tiene que ver con los miembros de la cúpula policial a los que se ordenó que buscaran trapos sucios del pasado de los dirigentes de Unidas Podemos o que se inventaron una cuenta en un banco de Andorra para implicar al alcalde de Barcelona. No está relacionado con los hechos que han llevado al ministro de entonces, Jorge Fernández Díaz, al banquillo de los acusados en un juicio que se celebrará en 2026, junto a su número dos, ahora encarcelado por otros asuntos. 

El tema de la semana es otro y tiene que ver con una militante socialista. Aunque no era ministra ni alto cargo del PSOE, se creía que era Eliot Ness y se reunió con empresarios imputados por presuntos fraudes millonarios para que le contaran algo con lo que se pudiera desacreditar a la UCO. La unidad de la Guardia Civil participa como policía judicial en varias investigaciones que afectan al Gobierno. Quizá nadie le encargó esa misión o quizá alguien le asignó los contactos con personajes algo truculentos con los que era mejor no relacionarse directamente.  

Cualquiera de las dos opciones obliga al PSOE a dar una explicación sobre las actividades de Díez. No vale con aplicar la fórmula del ‘y tú más’ y recordar los escándalos de la época de Rajoy. No vale con que María Jesús Montero se ponga a recitar una letanía en el Congreso: Gürtel, Púnica, Lezo, etcétera. Eso es lo que hacía el Gobierno de Rajoy cuando le preguntaban por Gürtel. Recordemos que Rajoy puso a toda la plana mayor del PP a su espalda para que escucharan con un semblante sombrío a su líder decir que la investigación de la Gürtel era “una trama contra el PP”. Y que diputados del PP se han dedicado en las comisiones de investigación en el Congreso en años posteriores a hacer insinuaciones sin pruebas para atacar las investigaciones de la UDEF sobre Gürtel, incluso recurriendo a la ayuda del inefable comisario Villarejo. Eso también es la política. No nos engañemos. A la hora de atacar al adversario, rebuscas en la basura por muy mal que huela.

El PSOE debería dar una respuesta a la intervención de Leire Díez en sus contactos con empresarios. He escrito esta semana dos artículos sobre el tema. El desmentido inicial que destacaba que el partido no tenía nada que ver con ella no era suficiente y el partido se dio cuenta de ello. Pero luego el anuncio de que le abrían un “expediente informativo” desvelaba que no eran conscientes de la gravedad de la situación. Díez fue a la redacción de El Español con un vídeo de contenido sexual supuestamente protagonizado por un fiscal. ¿Cómo puede alguien pensar que eso no perjudica a la imagen del PSOE?

“Que el PSOE tuviera indicios de que en la UCO pudieran existir agentes dedicados a reeditar las prácticas de aquellos años contra el Gobierno de Sánchez o la dirección de su partido no justifica que recurriera a estos métodos. La basura no se combate con basura”, ha escrito Esther Palomera. Evidentemente.


Rafael Simancas y Santos Cerdán salen del hemiciclo del Congreso el 27 de mayo.

No se puede montar una operación tan desvergonzada y, que se sepa, inútil sólo porque crees que algunos miembros de una unidad policial están trabajando contra el Gobierno. Porque al final eres como esos funcionarios a los que quieres denunciar. Han vuelto a salir los mensajes que un capitán de la UCO envió a su confidente en 2021. Sobre cómo enfocaba su trabajo profesional, bastan los mensajes en que bromeaba con que el Gobierno iba a eliminarlo. “Una bomba lapa en los bajos” de su coche, dice Juan Vicente Bonilla. Su objetivo era acabar con el Gobierno de una forma u otra. Bonilla dejó la UCO y es ahora gerente de seguridad de la sanidad madrileña. Con sus antecedentes, lo raro es que no le hayan nombrado consejero de Justicia. 

Otros personajes de la trama son también para dar de comer aparte. Son empresarios imputados por graves delitos económicos que alegan en su reunión con Leire Díez que han sido injustamente acusados por la UCO, aunque las decisiones sobre ellos las ha tomado un juez, no la Guardia Civil. Uno de ellos, Alejandro Hamlyn, dice que tiene pruebas que lo demuestran pero no enseña ninguna. No lo va a hacer hasta que le garanticen un trato de favor. Díez le ofrece una reunión con la Fiscalía, aunque de esas ha tenido muchas. No se sabe cómo la militante socialista puede hacer tal ofrecimiento. The Objective, sí, ese medio, dice que uno de ellos consiguió ventajas de la Hacienda foral vasca. Quien conoce a esa Hacienda y cree que va a favorecer a un presunto defraudador sólo porque lo pida una don nadie de Madrid no conoce cómo funciona.

Un segundo empresario imputado que aparece en la grabación ha intentado echar una mano a Leire Díez y sólo ha conseguido hundirla aún más. Javier Pérez Dolset afirma que “Leire lleva investigando conmigo desde hace seis años las cloacas del Estado”. Dos artículos y medio publicados por elDiario.es sobre las cloacas de Interior con documentos citados han sido más relevantes que la tarea de Dolset y Díez durante seis años. Además, indica que Díez trabajaba con él cuando ostentaba cargos de confianza de menor nivel en dos empresas públicas, aunque sostiene que en el tiempo que estaba en Correos “nos pudo ayudar menos”.

Todo es tan grave como estrafalario. Con el aire de alguien que ha perdido el contacto con la realidad, Díez ha escrito en un grupo de WhatsApp con militantes socialistas que “la verdad es una” y que se sabrá. También niega tener cualquier “vinculación con Ferraz”. Afirma que la filtración de esa grabación es culpa de las “cloacas mediáticas”. Será porque la han difundido algunos de los interlocutores de esa reunión en los que confiaba tanto. Termina el mensaje citando la famosa frase de Martin Niemöller (“Primero vinieron por los socialistas, y yo no dije nada…”), lo que confirma que está tronada. Es de nota que un partido como el PSOE vea ahora cuestionada su reputación por alguien así. Ahora fuentes de Ferraz afirman que será expulsada si se comprueba que se presentó en esas reuniones en nombre del partido o por el “daño reputacional” sufrido por su culpa. Mira tú, qué perspicacia.

En el apartado mediático, del que sale la materia prima utilizada por el PP, hay revelaciones sospechosas. El Confidencial ha sacado un audio de trece segundos en el que se escucha a Pérez Dolset afirmar que quien dirige la operación es Sánchez: “Esto es Pedro Sánchez, directamente con Cerdán, con Santos Cerdán, y directamente con Leire”. No se dice con quién está hablando, a quién está intentando convencer, pero sí que la conversación es de septiembre de 2024. Es extraño que una frase tan contundente no aparezca en la larga conversación de 53 minutos que ha aparecido esta semana. Porque está claro que le está vendiendo la moto a alguien.

Aún más sospechosos son los rumores lanzados por varios medios sobre un informe de la UCO que implicaría a Santos Cerdán en maniobras ilegales sobre licitaciones de obras públicas. Hace quince días, Pilar Gómez, de Artículo 14, publicó que iba a entregarse al juez “en las próximas horas”. A día de hoy, en torno a 360 horas después, nada se sabe del informe y de su contenido. De momento, ha resultado rentable para la maquinaria de titulares. De los rumores se pasó a especular sobre la reacción del Gobierno. ABC informó de que Moncloa espera un “informe blando” sobre Cerdán para iniciar “una ofensiva contra la UCO”. Nunca antes se ha hablado tanto de un informe de cuya existencia nadie puede confirmar nada.

Acabo con unas frases fantásticas que se pueden relacionar con la manifestación del PP del 8 de junio. “Si tú dices ‘los que ganan en las urnas no nos representan, te estás cargando el sistema democrático. Aquí lo que no vale es decir ‘si gano yo, yo sí represento, pero si ganas tú, no”. Es de una tertulia televisiva de 2013 y la pronuncia nada menos que Miguel Ángel Rodríguez. Claro que en el PP dirán que fue Feijóo quien ganó las elecciones de 2023, pero no es presidente porque no quiere. Hay que reconocer que la política es el escenario perfecto para los que no conocen la vergüenza.

El novio va pa’lante (como decía el asesor de la novia)


El paseíllo de González Amador al llegar al Tribunal Supremo para declarar el 23 de mayo.

Se acabaron los trucos de Alberto González Amador con los que seguir dilatando un procedimiento judicial que era de entrada bastante sencillo. La Agencia Tributaria descubrió un intento (chapucero) de ocultar ingresos millonarios a través de facturas falsas y lo comunicó a la Fiscalía, como es su obligación. A falta de algún recurso de la defensa que aún es posible, el novio de Isabel Díaz Ayuso irá a juicio para responder de sus actos. Veremos si confirma en la vista el reconocimiento de haber cometido dos delitos fiscales que realizó su abogado en una comunicación con la Fiscalía. En su última declaración judicial, Amador dijo que él no había autorizado al letrado a hacer esa admisión. En una situación similar, el cliente cogería del cuello al abogado y le despediría en ese mismo instante. Pero Amador no lo hizo, seguro que porque es una persona de gran corazón. Mi abogado cuenta al fiscal que soy un delincuente, pero no se lo voy a tener en cuenta porque es un buen tipo. 

Fuentes cercanas a la presidenta de Madrid, que en estos casos suele ser Miguel Ángel Rodríguez, han contado a Europa Press que el procesamiento es una muestra más del “aparato de Estado contra Ayuso”, además de un intento de Sánchez de “tapar sus escándalos”. Es algo que la propia Ayuso ha dicho desde el primer momento cuando asumió la defensa pública de los intereses de su pareja en una rueda de prensa en Leganés.

Uno pensaría que las asociaciones judiciales conservadoras APM y Francisco de Vitoria alzarían su voz para denunciar este ataque a la independencia judicial que supone una acusación velada de prevaricación. Pues no ha habido suerte. Están muy ocupadas con las protestas contra el proyecto de ley presentado por el Gobierno para reformar la instrucción judicial y reforzar el papel de los fiscales. Pero, cuidado, ellos dicen que se trata de una actuación “apolítica”. Y luego dicen que los jueces son muy adustos y no tienen sentido del humor.