La defensa de la víctima del vídeo sexual de los canteranos del Real Madrid pide cuatro años de cárcel para Asencio

La defensa de la víctima del vídeo sexual de los canteranos del Real Madrid pide cuatro años de cárcel para Asencio

Se le imputa un delito de revelación de secretos en concurso con otro de pornografía infantil porque supuestamente recibió las imágenes y las enseñó a una tercera persona siendo consciente de tres circunstancias: que se había grabado sin permiso, que las afectadas habían pedido que se borrara y que una de las chicas era menor

El caso de los canteranos del Real Madrid no es aislado y evidencia una violencia machista que arrasa por los móviles

La defensa de la menor que aparece en el vídeo sexual que tres canteranos del Real Madrid grabaron en 2023 sin el consentimiento de ella en un club de playa de Gran Canaria pide cuatro años de cárcel para el defensa Raúl Asencio, al que acusa de haberlo compartido a sabiendas de que fue grabado sin permiso.

El letrado que la representa ha confirmado a EFE que, como acusación particular, han pedido ya la apertura de juicio por delitos de revelación de secretos y pornografía infantil contra los jugadores Juan Rodríguez, Ferrán Ruiz y Andrés García, que ya no pertenecen al Real Madrid, y también contra Raúl Asencio, que en la actualidad milita en el primer equipo del club blanco.

A los tres primeros les acusa de un delito de revelación de secretos consistente en la grabación de un vídeo sexual sin permiso, con el agravante de haberlo difundido, y de otro de pornografía infantil, ya que en las imágenes aparece una menor, por lo que solicita que sean condenados a cuatros años y diez meses de cárcel.

Raúl Asencio no estuvo en el encuentro sexual consentido que sus tres compañeros mantuvieron con las dos jóvenes afectadas, pero se le imputa un delito de revelación de secretos en concurso con otro de pornografía infantil, porque supuestamente recibió el vídeo y lo enseñó a una tercera persona siendo consciente de tres circunstancias: que se había grabado sin permiso, que las afectadas habían pedido que se borrara y que una de las chicas era menor.

La segunda acusación particular, ejercida por la otra joven que aparece en las imágenes, todavía no ha presentado escrito de cargos, pero la letrada que la dirige ha precisado a EFE que formulará una calificación jurídica muy similar a la propuesta por su compañero.

La Guardia Civil no logró recuperar de los teléfonos móviles de los cuatro procesados los vídeos del encuentro sexual (en la instrucción se alude a cinco), pero sí varios chats colectivos en los que supuestamente se compartieron, así como los mensajes con los que reaccionaron a esas imágenes las personas que las recibieron.

Por ello, la acusación ejercida por la denunciante que era menor cuando ocurrieron los hechos -tenía 16 años- pedirá que varias de esas personas que los recibieron y los comentaron sean citadas a declarar en el juicio en calidad de testigos.

Qué ocurrió ese 15 de junio según el auto

El auto, según detalla la agencia EFE, subraya que, mientras todos se bañaban en la piscina y tomaban el sol juntos, una de las jóvenes dijo a los cuatro procesados que tenía 16 años, de modo que todos sabían que era menor.

En un momento dado, la menor y otra chica de 18 años accedieron a irse a una cabaña privada del club con Ferrán Ruiz, Juan Rodríguez y Andrés García, con los mantuvieron sexo consentido, mientras que Raúl Asencio prefirió quedarse al margen y pasar el tiempo con otra chica en la piscina general de las instalaciones.

El auto explica que, por las pruebas recabadas hasta este momento, presuntamente Ferrán Ruiz se puso grabar la escena sexual sin pedir permiso a las chicas y sin que estas supieran que lo estaba haciendo.

Después, agrega, le pasó el móvil a Juan Rodríguez para que siguiera registrando la escena desde otra perspectiva, cosa que este habría hecho. Fue entonces cuando las jóvenes descubrieron lo que estaba pasando, aunque aún no tenían claro si las había grabado o no, por lo que salieron de la cabaña en busca de su amiga y de Raúl Asencio para contarles lo sucedido.

Tras hablar con Asencio, las jóvenes exigieron a Ferrán Ruiz que borrara las imágenes que tuviera, en concreto fotos de ellas tomando el sol sin sujetador y los vídeos de la relación sexual. El juez precisa que, en ese momento, Ruiz reconoció a las chicas que había grabado cinco vídeos y los borró de su móvil en su presencia.

Sin embargo, detalla, “bien porque tenía copias en otras carpetas, bien porque los había enviado ya a otras personas, los vídeos se conservaron” y, al terminar ese día, Ferrán Ruiz, Juan Rodríguez y Andrés García disponían de esas imágenes y las compartieron con diversas personas mediante aplicaciones de mensajería instantánea, enviándolas no solo a destinatarios concretos, sino a tres grupos de difusión colectivos.

Y lo hicieron sin limitar las imágenes a un solo visionado, “con lo que quedaron almacenados en los terminales de los destinatarios que, a su vez, tuvieron la posibilidad de enviarlos a terceras personas”, explica el juez. Las conversaciones recuperadas de los móviles revelan además que Rodríguez habría llegado a reconocer que “se la sudaba que una de las posibles víctimas fuera menor de edad”.

Raúl Asencio vuelve a aparecer en este asunto casi una semana después, el 21 de junio, cuando -siempre según el auto- le solicitó a Rodríguez que le enviara uno de los vídeos a sabiendas de se grabó sin permiso, de que las afectabas habían exigido que se borrase y de que en las imágenes aparecía una menor de edad.

El defensa del Real Madrid lo vio y se lo enseñó a un tercero, algo que él mismo reconoce en un mensaje de voz que envió a esa persona días más tarde, remarca el instructor. “Oye, hermano, yo a ti te lo enseñé porque me lo pasó Juan”, dice en ese audio de Whatsapp.

El auto explica que, como consecuencia de estos hechos, la menor padece “un trastorno por estrés postraumático asociado a sintomatología ansioso-depresiva”, que disminuye su “capacidad funcional personal, social y académica”. La otra joven también presenta un cuadro de estés postraumático y estado ansioso-depresivo.