
Page pide un adelanto electoral y espera que la política nacional no vuelva a “arrastrar” al PSOE en las autonomías
«Lo que me encuentro, es a multitud de responsables locales y territoriales, en un grito contenido, deseando que las generales no afecten a las municipales y autonómicas presidente de Castilla-La Mancha vuelve a mostrar su preocupación por el efecto
El presidente de las Cortes de Castilla-La Mancha: “El PSOE no es una mafia y el sinvergüenza no puede quedarse”
El presidente de Castilla-La Mancha, Emiliano García-Page, ha afirmado este miércoles que “no puede volver a pasar” que la política nacional “arrastre” al PSOE en los territorios, por lo que ha abogado por un adelanto electoral.
“Yo, lo que me encuentro, es a multitud de responsables locales y territoriales, en un grito contenido, deseando que las generales no afecten a las municipales y autonómicas, y si eso significa que el veredicto de los españoles sobre la política nacional sea anterior, yo creo que la inmensa mayoría lo preferiría”, ha indicado en el transcurso con una entrevista en ’65ymás’.
Ya lo había deslizado días atrás. Este martes, el presidente de las Cortes de Castilla-La Mancha y secretario general del PSOE de Guadalajara, Pablo Bellido, también incide en la idea en una entrevista con elDiario.es Castilla-La Mancha.
“Creo que nos están haciendo daño las informaciones recientes. Hace daño a la marca PSOE lo que se está publicando. A nosotros más que a otros partidos. A otros la corrupción no les hace tanto daño. Sus votantes son más comprensivos o les importan otros temas”, declaraba.
Tras recordar que no es la primera vez que se habla de un posible adelanto electoral dado lo “precario” del actual Gobierno de España, Bellido se remitía a las palabras del propio Page que días atrás aludió al “daño electoral” que sufrió el PSOE en 2023 en las elecciones autonómicas y municipales por el efecto ‘arrastre’ de la política nacional.
El socialista cree que el comentario del barón castellanomanchego es “sensato” y advierte: “Si vamos a llegar a las elecciones municipales otra vez con una inestabilidad gubernamental y con una imagen de partido que luego paguen los alcaldes y alcaldesas y los presidentes autonómicos y los candidatos y candidatas por extensión… Si en unas elecciones, en las que en lugar de medir su trabajo, se está juzgando, se están evaluando decisiones que no toman ellos, pues eso no parece que sea bueno para el Partido Socialista”.