Ayuso renuncia a presentar enmiendas y asume que la elección del presidente del PP quede en manos de compromisarios

Ayuso renuncia a presentar enmiendas y asume que la elección del presidente del PP quede en manos de compromisarios

«Hay matices que deben ser concretados en el Reglamento Marco de Congresos y que se abordarán posteriormente, y para los que el PP de Madrid trabajará junto a la nueva dirección», aseguran desde el partido de Ayuso

Feijóo elimina las primarias directas en el PP sin impedir que los compromisarios puedan cambiar la voluntad de los militantes

Alberto Núñez Feijóo tendrá un congreso nacional de reelección como líder del PP en calma. La única duda que había ha quedado despejada este miércoles: Isabel Díaz Ayuso y el PP de Madrid no presentarán enmiendas al sistema de elección del presidente que fulmina las primarias que se habían introducido en 2017. El equipo de Ayuso asume así un método que deja la decisión final en manos de los compromisarios que asisten en persona al cónclave, según han informado fuentes del PP de Madrid a elDiario.es.

“El modelo propuesto aúna en una votación la elección del candidato a presidente y los compromisarios, vinculando a éstos directamente con el candidato por el que son elegidos”, apunta el partido de Ayuso en una nota. “Desde el PP de Madrid se ha defendido la máxima de ‘un afiliado, un voto’. Se trata de un principio que busca que el voto del afiliado cuente, que el afiliado sea la base del proceso congresual. De esta manera la voz del afiliado se respeta, puesto que el compromisario se debe a lo votado por el afiliado, ya que en su voto va intrínseco el respaldo a un candidato a presidente”, sostiene la nota.

Pero desde el PP de Madrid se añade: “Hay matices que deben ser concretados en el Reglamento Marco de Congresos y que se abordaran posteriormente y para los que el PP de Madrid trabajará junto a la nueva dirección del partido”.

“No presentaremos enmiendas”, han confirmado fuentes de la dirección del PP de Madrid a elDiario.es, lo que no evita que algún compromisario (de Madrid o de otra asamblea) sí presente enmiendas y las mantenga vivas para su debate y votación en el plenario que se celebrará el primer fin de semana de julio. Eso sí: sin el apoyo del PP de Madrid, difícilmente podrá salir adelante.

Ayuso asume así un sistema que desde el principio calificó como un avance, pero contra el que también se pronunció por no ser un método de primarias puras. Ese “un militante, un voto” por el que dijo en una entrevista en ‘Abc’ que iba a “hacer lo necesario”.

La ponencia de estatutos del PP pondrá fin así de forma definitiva a las primarias directas para elegir a su líder. Pese a lo prometido por Feijóo, el sistema no impedirá que los delegados puedan revertir en un congreso lo que hayan elegido previamente los militantes con su voto previo.

El PP volverá, con matices, a un método clásico de compromisarios que serán elegidos en urna por los militantes en cada provincia a partir de “listas abiertas” y vinculadas a un candidato concreto. Pero nadie podrá comprobar a quién votan efectivamente dichos compromisarios o qué pasará con aquellos que estuvieran vinculados a candidaturas sin opciones o retiradas.

Desde el PP de Madrid recuerdan que Ayuso vio positivo desde el principio el nuevo sistema. “Nos gusta el espíritu de la reforma propuesta”, afirmaron entonces. “Que afiliados sigan votando al presidente es respetar ‘un afiliado un voto”, añadieron.

Pero en aquel momento ya se avisó de que se estaba “analizando el texto”. “Hay cuestiones que deben ser concretadas para garantizar que esta reforma cumple su objetivo”, zanjó el PP de Madrid entonces.

Ahora, con el plazo de enmiendas ya cerrado, Ayuso renuncia a dar la batalla en el congreso, algo que sí hizo Cristina Cifuentes en 2017. Fue ella la que empujó al PP de Mariano Rajoy a aceptar las primarias puras en ámbitos menores al estatal. Esa opción desaparece del todo. La presidenta madrileña confía en que el reglamento que desarrolle posteriormente el sistema afine los “matices” del sistema que no le gustan.