Rodaje en un inédito refugio antiaéreo de la guerra civil en Cuenca: «El cine es ficción, hay que tratarlo como tal»

La guerra civil es un episodio que constantemente abre heridas, pero también las cierra. Al mismo tiempo, al igual que ocurre con otros acontecimientos y periodos históricos, aparecen vestigios, pequeños retazos que nos recuerdan que en determinados lugares vivieron personas, tuvieron miedo, sintieron incertidumbre, pero en definitiva encierran sus propias historias. Todo esto también ocurre en Refugio, un cortometraje de Dojo Producciones, codirigido por Rodrigo Muñoz Beltrán y Dorian Sanz. E

Esta pieza audiovisual narra la historia de dos mujeres, Lola e Isabel, que se guarecen en un refugio antiaéreo durante los bombardeos ocurridos en la ciudad de Cuenca en el ecuador de la Guerra Civil Española. Cada una esconde sus secretos, sus sentimientos y sus opiniones sobre este conflicto que ya se ha cobrado muchas vidas y que ha dividido a la población.

Muñoz Beltrán explica, en la entrevista mantenida con elDiario.es Castilla–La Mancha, que se puede decir que “está inspirado en hechos reales, ya que Cuenca sufrió varios bombardeos en este episodio histórico, al ser una ciudad de retaguardia, pero partidaria republicana. Sin embargo, lo que es el grueso de la historia que es la parte ubicada en el refugio y la conversación entre las dos actrices protagonistas es una historia totalmente ficcionada”.

Tratar el tema de la guerra civil puede ser un arma de doble filo, en primer lugar porque ya es un asunto que ha sido frecuentemente abordado en el cine y en la literatura, pero también porque dependiendo de la perspectiva con la que está contado o a quien se otorgue la voz principal, el espectador puede hacerse una idea preconcebida de la intencionalidad de la pieza audiovisual.

Rodrigo Muñoz señala rotundo que “el cine es ficción y hay que tratarlo como tal. La historia de la guerra civil, por muy trágica que sea es un periodo histórico de España. El cine no es tanto la memoria histórica. Eso es algo que debe ser contrastado con hechos y que es absolutamente necesario para la sociedad de cara a curar heridas. Pero el cine es ficción y puedes basarte en cualquier acontecimiento que te venga bien para poder escribir un guion”.

En la conversación, el codirector ha señalado ejemplos de películas con ambientación histórica que se han estrenado recientemente como Napoleón (2024) o Gladiator II que han sido criticadas duramente por “tener incoherencias históricas terribles”.

Asegura que ha recibido comentarios negativos en redes sociales, pero que “hay que ir al cine para disfrutar, o también podemos cabrearnos con aquello que estamos viendo. Pero en este caso no es un documental, ni un libro histórico, y hay que ponerse delante de la pantalla sin juzgar, porque al final todo en este corto es ficción”.

Fotografía del rodaje del cortometraje ‘Refugio’ en Cuenca con las dos protagonistas, Cristina Abad y Lucía Esteso

Esta pieza audiovisual se rodó en el Refugio del Cerrillo de San Roque entre el 16 y el 18 de agosto de 2024, así como en otros emplazamientos del Casco Antiguo de Cuenca. “El rodaje fue muy complicado, estar dentro era bastante claustrofóbico. Para bajar a la localización exacta hay que descender por unas escaleras de caracol muy estrechas y atravesar unos cien metros de barro. Estuvimos allí metidos entre 12 y 14 horas, con muchísima humedad, pero fue un auténtico reto”, explica Rodrigo Muñoz.

Un cortometraje que está protagonizado por las actrices Lucía Esteso –Caronte, Águila Roja o El Internado– y Cristina Abad –Acacias 38 o Servir y proteger–, así como un equipo de extras que son de grupos de teatro de Cuenca, en un guiño a potenciar el talento local de la capital conquense y de su provincia. “Lucía también es conquense, de Mota del Cuervo. El lenguaje del corto está adaptado a la época y al argot conquense, que quizá a Cristina –que es madrileña– le costó un poco más adaptarse. Pero ambas han hecho un trabajo absolutamente descomunal, se superaron a sí mismas. Señalan que es el rodaje más difícil que han hecho nunca por todos los miedos personales que tienen, pero lograron meterse de lleno en el papel”, apunta Muñoz Beltrán.

Un emplazamiento único para el rodaje

El Refugio del Cerrillo de San Roque, escenario del grueso del cortometraje fue construido alrededor de 1938. El codirector del corto nos relata que cuando habló con el arqueólogo Santiago David Domínguez sobre el guion que estaba escribiendo, le dijo: “Tengo un emplazamiento perfecto para rodar, un refugio que lleva ochenta años sin tocarse”, y así desarrolló diferentes iniciativas para hacer accesible el entrar a este lugar.

Cuenca no solo es ciudad Patrimonio de la Humanidad por lo que se ve en la superficie, sino que esconde recovecos subterráneos como varios refugios antiaéreos de la época de la guerra civil. Dos de ellos, el ‘Refugio Antiaéreo de Alfonso VIII’ y el ‘Refugio Antiaéreo de Calderón de la Barca’ están musealizados, aunque el primero permanece cerrado sin fecha anunciada de apertura.

Equipo al completo del cortometraje ‘Refugio’ en Cuenca

Para Rodrigo Muñoz, una de las claves de poder grabar en Cuenca es “enseñar a los conquenses un sitio que no han visto y, aunque no se pueda acceder a él de manera libre, que conozcan que la ciudad tiene también un patrimonio muy importante aunque no esté a simple vista”.

Además, asegura que “es un sitio que permanece intacto, tal y como se dejó en los años 1940. Existe una entrada, pero por seguridad no podemos decir dónde está, ya que solo se puede acceder con un arqueólogo especializado”.

Una pieza audiovisual que quiere cruzar fronteras

El guion del cortometraje empezó a gestarse en septiembre de 2023 y casi tres años después va a salir a la luz. Su estreno tendrá lugar el viernes 27 de junio a las 20 horas en los Multicines Odeón de Cuenca.

Muñoz Beltrán destaca que están enviando Refugio a varias distribuidoras para conseguir tener presencia en festivales de cine nacionales e internacionales. “Lo más importante es que desde fuera puedan disfrutar del entramado cultural e histórico que tiene el Casco Antiguo de Cuenca, tanto en su superficie como en su parte subterránea. Que la gente conozca Cuenca más allá de nuestras fronteras, también como un lugar de rodaje”, explica Rodrigo Muñoz.

El cortometraje ha contado con la subvención del 75% del presupuesto por parte de la Junta de Comunidades de Castilla–La Mancha y del Consorcio de la ciudad de Cuenca, un hecho que Muñoz Beltrán ha querido agradecer, ya que “la industria del cine es súper cara y muy lenta. Han pasado casi tres años hasta que el proyecto se ha hecho realidad”.