Feijóo clausura el congreso de su reelección al frente del PP: «No vamos a hacer un cordón sanitario a Vox»

Feijóo clausura el congreso de su reelección al frente del PP: «No vamos a hacer un cordón sanitario a Vox»

El jefe de la oposición plantea a los independentistas «claridad y vigilancia», pero les abre la puerta a pactar cuando llegue al Gobierno. Algo que, ha asumido, «no va a ser un paseo por el campo»: «No cabe el descuido ni el exceso de confianza»

El PP encumbra a Feijóo con el 99,24% de los votos en un congreso manso por la urgencia de echar a Sánchez

“No vamos a hacer un cordón sanitario a Vox. Es la tercera fuerza del país, sus votantes merecen respeto y no estoy dispuesto a arrinconarles”. Así ha presentado el reelegido líder del PP, Alberto Núñez Feijóo, sus credenciales para intentar ser presidente del Gobierno tras las próximas elecciones, sean estas cuando sean. En el discurso de clausura del XXI Congreso Nacional del PP, Feijóo ha dicho también estar dispuesto a negociar con los independentisas, a los que ha ofrecido “claridad y vigilancia” y pactos “dentro de la ley y la Constitución”. “O Sánchez o yo”, ha afirmado ante un partido entregado.

Feijóo fue reelegido ayer con el 99,24% de los votos. Este domingo ha cerrado el cónclave con un discurso en el que ha presumido de fuerza orgánica. “Aquí está todo el PP. Todos juntos, todos los que hemos construido el partido”, ha dicho en el arranque. Pero el congreso nacional ha tenido una ausencia notable: la de Pablo Casado. Su predecesor, orillado por quienes una vez lo auparon, no tiene asiento en ningún acto del partido desde que osó poner en duda la honorabilidad de Isabel Díaz Ayuso.

“El equipo me ha pedido por favor que no improvise”, ha bromeado desde el escenario, flanqueado por grandes banderas de España y de la UE. Pero en el PP nadie quería que un patinazo del líder pudiera ensombrecer un congreso a su mayor gloria, manso, en el que nadie ha planteado ninguna batalla interna real.

Todo el partido contiene el aliento ante unas encuestas contra las que el líder ha alertado al final: “No va a ser un paseo por el campo. Si algo sacamos en claro en 2023 es que frente a un adversario que solo conoce la ley de su propia ambición y deesperación no cabe el descuido ni el exceso de confianza. No nos confiemos con la sonrisa de las encuestas. La única sonrisa que vale es la de las urnas”.

Durante 45 minutos Feijóo ha desgranado un discurso en el que ha optado por no centrarse en los problemas del PSOE, sino en su futurible proyecto de Gobierno. Con todo, los escribas del líder del PP han hecho un remedo del histórico “yo acuso” de Emile Zola, quien denunció de esa forma el llamado ‘affaire Dreyfus’, una acusación injusta contra un alto cargo militar francés en el siglo XIX. Zola señaló las falsedades judiciales que se lanzaron contra el capitán francés, atacado por fuerzas económicas, políticas y mediáticas reaccionarias.

“Yo acuso al presidente del Gobierno de intentar quebrar deliberadamente la convivencia entre los españoles. Le acuso de bloquear la concertación política para aprovecharse del enfrentamiento entre españoles. De dejar la centralidad y someterse a las minorías. De olvidar que España es una nación. De retorcer la Constitución y violentar en su provecho el principio de legalidad que a todos nos obliga”.

“Le acuso de trocear el Estado, las fronteras, la caja común, la acción exterior, la política migratoria. De colonizar las instituciones para expandir su poder. Y de promoverla desigualdad entre ciudadanos. Los números no mienten: la España de 2025 es más desigual que la de 2018. Es verdad”. Un dato que no es cierto: El riesgo de pobreza ha bajado del 20% por primera vez desde 2008.

Feijóo ha asumido “tres compromisos concretos”. Primero, “un plan de regeneración democrática que garantice contrapesos al poder, instituciones sin servidumbres políticas y con dirigentes neutrales”. Segundo, “convocar elecciones” si presenta presupuestos y no se los aprueban. Tercero: “Nunca separaré a los españoles con el dedo desde el Palacio de la Moncloa”.

Poco después aseguró que, si gobierna, no va a reunirse con EH Bildu, partido a quien impondrá un “cordón sanitario” mientras “no pidan perdón” por los crímenes de ETA ni ayuden “a resolver los asesinatos pendientes”.

Pactar con Vox… y con Junts

“Solo hay dos opciones” tras las próximas elecciones, ha sostenido. “O Sánchez o yo, no hay más”. “Y yo quiero un Gobierno en solitario”, ha añadido, para decir que buscará “alianzas en el Congreso”.

Con Bildu no, pero con quien sí pactará Feijóo para llegar al poder es con Vox. No es una novedad, ya que en 2023 los de Santiago Abascal fueron los únicos que apoyaron su investidura, además de UPN y Coalición Canaria. Pero el líder del PP ha querido remarcar esta idea con varias declaraciones concretas.

Según ha dicho, la “primera frase” del hipotético discurso de investidura que pronuncie tras las próximas elecciones “será para declarar que el muro entre españoles ya no existe”. “Se acabó la pesadilla”, ha añadido. La referencia al “muro” no es nueva. La lleva usando desde 2023 para citar, erroneamente, a Pedro Sánchez, quien dijo que “el único muro eficaz contra las políticas de la ultraderecha en comunidades y ayuntamientos ha sido el Gobierno de España”.

Por si quedabana dudas, Feijóo ha remachado: “No vamos a hacer un cordón sanitario a Vox”. Es la tercera fuerza del país, sus votantes merecen respeto y no estoy dispuesto a arrinconarles“.

El líder del PP ha advertido de que puede darse la misma circunstancia que tras el 23J. “¿Qué pasa si faltan votos?”, se ha preguntado. “Lo que ya pasó hace unos años”, ha dicho. “No voy a dar lo que no quiero ni puedo. No voy a firmar nada que vaya en contra de los que hemos aprobado aquí. Nada es nada. Lo siento”, ha afirmado.

Pero Feijóo sí ha abierto la puerta a pactar con los independentistas, incluido Junts. A estas fuerzas les ha ofrecido “claridad y vigilancia”. “No me dedico a engañar a nadie, tampoco a ellos”, ha afirmado. “Fuera de la ley y de la Constitución, nada de nada”, ha sostenido, para añadir que no va “a consentir más desafíos al país”.

Ayer mismo, el alcalde de Badalona y presidente del congreso del PP, Xavier García Albiol, también defendió los pactos con los independentistas. “No veo problema en llegar a un acuerdo con Junts para una moción de censura”, dijo en declaraciones a los medios. El uso de la palabra “claridad” no es baladí. La norma que rige los referéndum de independencia en Canadá se llama precisamente “ley de Claridad” y permitió reconducir los problemas con Quebec. En 2023, Feijóo se planteó el indulto a Carles Puigdemont como parte de un acuerdo para su investidura.

Feijóo también ha dicho que se abrirá a pactar con el PSOE. Eso sí, sin Pedro Sánchez al frente. “Con este PSOE es imposible pactar, con el ‘sanchismo no se puede acordar. Lo sé por experiencia”, ha dicho. Una afirmación falsa ya que Feijóo y Sánchez han pactado desde la renovación del CGPJ y el Tribunal Constitucional a leyes o incluso una reforma constitucional. “Eso no significa renunciar a los consensos en los asuntos que lo requiere”, ha afirmado. “La Presidencia del Gobierno exige grandeza y la voy a tener”, ha dicho.

Dureza con los migrantes, inconcreción en defensa

Feijóo también ha esbozado levemente algunas de las acciones que pondrá en marcha si llega al Gobierno. El líder del PP ha recuperado su ya clásico “plan de regeneración democrática e institucional” y ha comprometido “aprobar el Plan de Vivienda del PP en el primer Consejo de Ministros, que consiste básicamente en liberalizar suelo, reducir controles y bajar impuestos.

Una idea que ha hecho extensible a todos los ciudadanos. “Bamos a bajar los impuestos”, ha dicho de forma genérica, sin concretar. Además ha dicho que va a “incrementar los médicos de familia”, pese a reconocer que es una competencia autonómic y, aprobar “un Pacto Nacional del Agua.

Pero el mayor aplauso se lo ha llevado al hablar de las personas migrantes y, a continuación, de seguridad. Una relación que hoy no ha explicitado, a diferencia de lo que hizo en campaña, aunque sí ha trazado una línea que une ambos fenómenos.

Feijóo ha dicho que va a “reducir la inmigración ilegal”, algo que, ha sostenido, “parece razobable”. “¿Cómo no va a ser razonable reducir lo ilegal?”, se ha cuestionado, para añadir que no va a “simplificar un problema complejo”. El líder del PP sí ha reconocido que España “necesita” a las personas migrantes. “Quien viene a trabajar, sin problemas”.

“Hay que reforzar la seguridad”, ha añadido a continuación, “para caminar tranquilos, tranquilas, por las calles de España”. Y “seguridad para aquellos que velan por ella”. Es decir, para las fuerzas y cuerpos de seguridad del Estado. “Merecen recursos, reconocimiento y autoridad. Y la tendrán”, ha sostenido.

Menos claro ha sido en política de Defensa y, en concreto, sobre el gasto militar. Feijóo ha intentado no comprometerse a cumplir el 5% del PIB en defensa que exige la OTAN y EE UU, aunque ha dado pistas de que sí está dispuesto a cumplirlo.

Ante el PP, no ha querido decirlo, pero se ha excusado en que no tiene la información. “Me gustaría deciros hasta la última cifra de esta cuestión”, ha asegurado. “Pero en tres años, por primera vez en la democracia española, el Gobierno no ha hablado con el principal partido de España, ni de política de defensa ni de política exterior”.

Eso sí, ha afirmado: “Si firmo un papel, lo cumplo”. Una referencia a la reciente cumbre de la OTAN en la que Sánchez se negó a asumir ese 5%. En el PP han dicho, a la vez, que España sí se comprometió y que el país se quedó aislado de sus aliados. Fue, de hecho, lo que expresó este sábado el jefe del PP Europeo, el alemán Manfred Weber, quien arremetió contra Sánchez por desmarcarse

Finalmente, Feijóo ha anunciado “una Ley de Lenguas para que todos los niños españoles puedan ser educados en español”.

Ayuso: “Vamos a estar en todo momento a tu lado” (y “vigilantes”)

Antes de Feijóo ha intervenido Isabel Díaz Ayuso como anfitriona del congreso. La presidenta madrileña sí ha dedicado la más de media hora que ha estado en el escenario para arremeter con todo contra Pedro Sánchez, como suele.

La dirigente ha verbalizado la unidad que el PP ha teatralizado durante todo el fin de semana: “Vamos a estar en todo momento a tu lado”. “Qué valentía hay que tener para ponerse al frente de este morlaco en este momento”, ha asegurado. Por eso te vamos a acompañar“, ha sostenido. Eso sí, le ha advertido: ”Y vamos a estar vigilantes“.

“Miles de personas nos hemos reunido este fin de semana para decirle a los españoles que esta terrible situación que estamos viviendo llega a su fin, que somos una de las naciones sin las que el mundo no se entendería y que un madrileño de Galicia, con este enorme equipo detrás, va a devolver a España a los españoles, como sucedió en la Transición”.