
El Consorcio de Bomberos admite ante la jueza de la dana la orden de retirar de la rambla del Poyo los efectivos de vigilancia
El informe oficial detalla que, «sobre las 14.43», la unidad formada por un vehículo ligero y una autobomba fue desmovilizada por radio «para quedar en expectativa de servicio»
Hemeroteca – Un informe oficial de los Bomberos oculta a las Corts Valencianes los rescates del día de la DANA que investiga la jueza
Documento – Informes del Consorcio Provincial de Bomberos remitidos a la jueza de la dana
La jueza de la dana ha centrado uno de los focos de su investigación en la retirada de los efectivos de los Bomberos que medían el caudal del barranco del Poyo el pasado 29 de octubre, cuyo desbordamiento causó la mayoría de las 228 víctimas mortales (una de ellas embarazada de ocho meses). Y ya cuenta con documentación oficial que detalla cómo fue.
La decisión, de la que el Centro de Coordinación de Emergencias de la Generalitat no fue avisado, fue el “principal error” de la gestión de la catástrofe, según declaró el exsecretario autonómico de Emergencias, el imputado Emilio Argüeso, quien apuntó al entonces jefe del Consorcio Provincial de Bomberos, José Miguel Basset, quien no avisó a “nadie”. Un técnico que declaró como testigo el pasado 19 de junio dijo que la retirada de los Bomberos dejó a Emergencias “a ciegas”. Argüeso, según se desprende del informe pericial sobre sus comunicaciones aportado a la causa, se enteró semanas después de la dana, cuando lo desveló este diario. El informe remitido por el consorcio a la comisión de investigación de las Corts Valencianes tampoco aportaba dato alguno sobre la retirada de los efectivos que vigilaban los caudales. Ante las confusas explicaciones de Basset en la comisión de estudio de la dana en la Diputación de Valencia —primero dijo que los retiraron porque tenían “ganas de comer”, luego los Bomberos arguyeron que se habían comprado avituallamiento y, finalmente, el inspector jefe pidió disculpas— la jueza empezó a tirar del hilo en el marco de su instrucción. Sin embargo, una jefa de servicio de Emergencias desveló el pasado 17 de junio en su testifical ante la magistrada que la petición de movilizar a los Bomberos quedó registrada en el ‘CoordCom’, la ‘caja negra’ de las decisiones operativas ante la catástrofe. Otro jefe de servicio que declaró dos días después confirmó que en el Centro de Emergencias no se enteraron de la retirada de los Bomberos.
Con todos estos antecedentes, un informe oficial remitido a la jueza, al que ha tenido acceso elDiario.es, detalla la movilización por parte del Centro de Comunicaciones y Control del Consorcio Provincial de Bomberos de los efectivos en puntos clave del barranco del Poyo, tras la petición de seguimiento por parte de Emergencias. Se movilizó una unidad formada por un vehículo ligero y una autobomba para controlar la parte alta de la cuenca y puntos clave aguas abajo, como los municipios de Torrent, Picanya y Paiporta. Sin embargo, “sobre las 14.43”, recibieron la orden por radio de “regreso a la base” para “quedar en expectativa de servicio”. Apenas unas horas más tarde, el barranco se desbordó.
El informe, firmado por el oficial jefe y el técnico forestal de guardia el 29 de octubre, explica que, a las 13.05, la unidad de Bomberos Forestales de Buñol fue movilizada para realizar lecturas de nivel de agua en escalas en el barranco del Poyo en las zonas de Riba-roja —la parte alta de la cuenca— y Cheste. En la primera localidad, “si se alcanza un nivel crítico en ese punto, la consecuencia sería la afectación directa en los municipios aguas abajo, en concreto Torrent, Picanya y Paiporta”, afirma el informe. Se trata de algunas de las localidades más afectadas por las inundaciones de la dana.
La orden de “regreso a la base”
La unidad identificó “en primera instancia” en Riba-roja una lámina de agua de unos 70 u 80 centímetros. Una segunda inspección, sobre las 14.40, detecta que “el nivel ha bajado a la mitad”, por lo que los efectivos solicitan “instrucción al Consorcio Provincial de Bomberos. ”Sobre las 14.43, visto que ha disminuido el nivel a aproximadamente 40 centímetros, solicitando instrucciones la UBF [Unidad de Bomberos Forestales], se les indica el regreso a la base vía radio para quedar en expectativa de servicio“, afirma el informe.
El “despacho de las unidades” se realizó “vía radio” y “está monitorizado” por la Sala de Emergencias del Centro de Coordinación de la Generalitat en l’Eliana, según afirma el informe, que incide en que las comunicaciones quedan “registradas”, tal como marca la ley.
La segunda unidad, proveniente de Alzira, se movilizó a las 13.06 en la zona del río Magro para la lectura del nivel del agua en la escala del puente de Carlet. Los efectivos identificaron crecidas en el Riu Sec y, posteriormente en el Magro. “Conforme evoluciona la emergencia, estando la unidad en tránsito y próximos a la escala, visualizan un camión dentro de un torrente de agua sin conductor dentro y posteriormente otro camión, iniciándose la búsqueda de los conductores desaparecidos aguas abajo por parte de la UBF”, explica el informe en manos de la jueza de la dana.
“Sobre las 16.18”, se activó al coordinador forestal para la búsqueda por parte de la unidad de Alzira del camionero desaparecido y finalizó el servicio de vigilancia del caudal del Magro.
Un segundo informe remitido a la jueza detalla los datos registrados en el Sistema de Información Corporativa del 112 de la Generalitat sobre la movilización de los Bomberos. El número de teléfono del “llamante” corresponde, según explica el informe, al sargento coordinador de medio del Consorcio de Bomberos, presente el Centro de Comunicaciones y Control. La apertura del “incidente” (del caso, en la jerga interna) se produjo a las 12.57. “Van a movilizar bomberos para vigilar nivel de cauce”, reseña el documento dos minutos después, que también aporta la localización: Carlet y la rambla del Poyo.
A las 13.14 figura la última actuación registrada antes de la finalización del caso (anotada a las 21.06).