La Administración Trump redobla su injerencia en Brasil y sanciona al juez del Supremo por «la caza de brujas contra Bolsonaro»

La Administración Trump redobla su injerencia en Brasil y sanciona al juez del Supremo por «la caza de brujas contra Bolsonaro»

El secretario de Estado, Marco Rubio, anuncia la revocación del visado para el juez Alexandre de Moraes y sus allegados tras aplicar medidas cautelares contra el ex presidente en el juicio por la trama golpista contra Lula tras las elecciones de noviembre de 2022

Trump usa el poder de EEUU a través de los aranceles para influir en la política interna de Brasil en favor de su amigo Bolsonaro

Hace diez días Donald Trump decretó unos aranceles desorbitados del 50% a Brasil con el argumento del juicio a su amigo Jair Bolsonaro por golpista. Y este viernes, después de que el tribunal aprobara unas medidas cautelares contra el expresidente –tobillera electrónica y prohibición de usar redes sociales–, Marco Rubio, secretario de Estado de EEUU, ha anunciado sanciones contra el juez de la Corte Suprema Alexandre de Moraes.

“El presidente de EEUU dejó claro que su Administración exigirá responsabilidades a los extranjeros responsables de la censura de la libertad de expresión en Estados Unidos. La caza de brujas del juez Alexandre de Moraes, del Tribunal Supremo Federal de Brasil, contra Jair Bolsonaro supone un esquema de persecución y censura tan amplio que no solo viola los derechos fundamentales de los brasileños, sino que también se extiende más allá de las fronteras de Brasil y afecta a los estadounidenses. Por lo tanto, he ordenado la revocación de los visados de Moraes y sus compañeros en el tribunal, así como de sus familiares directos, con efecto inmediato”, ha afirmado Marco Rubio.

Pero las amenazas de Trump de las últimas semanas no eran nuevas. Marco Rubio ya declaró en mayo en una comparecencia en el Congreso que Washington estaba considerando sancionar a De Moraes por haber ordenado el cierre de las cuentas de redes sociales consideradas propagadoras de noticias falsas. Además, es el juez que se enfrentó a Elon Musk y suspendió cautelarmente X en Brasil.

La Corte Suprema de Brasil dictó este viernes nuevas medidas cautelares contra el expresidente Bolsonaro. El alto tribunal también le prohibió acercarse a embajadas, comunicarse con diplomáticos extranjeros, así como con otros investigados o procesados en el caso por golpismo.

El líder ultraderechista fue objeto de registros por parte de la Policía Federal, que allanó domicilios vinculados al exmandatario, quien afronta un juicio en el Supremo por liderar una conspiración golpista contra su sucesor, Luiz Inácio Lula da Silva. Uno de los registros tuvo lugar en su domicilio de Brasilia y el otro en la sede del Partido Liberal (PL).

La Fiscalía lo acusa de cinco delitos, entre ellos golpe de Estado y abolición violenta del Estado democrático de derechos, cuyas penas sumadas pueden llegar a los 40 años de prisión. En paralelo, Trump anunció la semana pasada un arancel adicional del 50% a las importaciones brasileñas por motivos principalmente políticos.

El presidente de EEUU usó la carta del anuncio de aranceles a Brasil la semana pasada para salir en defensa de Bolsonaro. Así, en su carta a Lula, el presidente de EEUU hablar de un “trato desgraciado” que, en su opinión, está sufriendo el expresidente Bolsonaro: “Es una caza de brujas que debe parar inmediatamente”. Trump, además, habla de “persecución a la libertad de expresión y a los derechos de los estadounidenses”, por las causas judiciales en Brasil contra los bulos en las redes sociales.

Lula, por su parte, respondió con la misma moneda: “Ante la declaración pública del presidente estadounidense, Donald Trump, es importante enfatizar: Brasil es un país soberano con instituciones independientes que no aceptarán el control de nadie; los procesos legales contra quienes planearon el golpe de Estado son competencia exclusiva de los tribunales brasileños y, por lo tanto, no están sujetos a ningún tipo de interferencia o amenaza que viole la independencia de las instituciones nacionales; en el contexto de las plataformas digitales, la sociedad brasileña rechaza el contenido de odio, el racismo, la pornografía infantil, las estafas, el fraude y los discursos que violan los derechos humanos y las libertades democráticas; en Brasil, la libertad de expresión no debe confundirse con la agresión ni con las prácticas violentas. Para operar en nuestro país, todas las empresas nacionales y extranjeras están sujetas a la legislación brasileña”.

El presidente brasileño, además, señaló que EEUU ha tenido un superávit comercial de más de 410 000 millones de dólares con Brasil en los últimos 15 años.