
Más visitantes, más riesgo: la montaña aragonesa registra en junio y julio más de 130 rescates y diez fallecidos
La tendencia es similar a la del año pasado. Un joven estadounidense continúa desaparecido en el Parque Nacional de Ordesa y Monte Perdido
Aragón despliega un contingente de más de 800 informadores para reforzar la seguridad en la montaña este verano
Cada verano, el Pirineo aragonés y otros espacios naturales de la comunidad se convierten en destino para miles de senderistas, barranquistas y alpinistas. Este año, ya se han superado las 130 intervenciones de rescate por parte de la Guardia Civil, con diez personas fallecidas y un ciudadano estadounidense que continúa desaparecido desde el 14 de julio. Los datos confirman la tendencia de los últimos años: más gente en la montaña implica más posibilidades de accidente.
Javier Franco, presidente de la Federación Aragonesa de Montaña (FAM), señala que “a nivel general vamos en la línea del año anterior, quizá un poco menos”. Sin embargo, reconoce que la tendencia desde la pandemia es clara: “Desde 2020 hemos notado en todo el sector un incremento de visitantes. Hay más gente en la montaña, y por tanto, más probabilidad de incidentes”. Por el momento, en el mes de junio se realizaron 52 intervenciones por parte de la Guardia Civil y en el de julio 86, en total 138 en los dos meses estivales.
Diez personas han fallecido en montaña o realizando actividades al aire libre en lo que va de verano, cinco en junio y cinco en julio. Dos han perdido la vida mientras practicaban barranquismo, tres montañeros por caídas, dos personas se ahogaron en zonas de baño, dos senderistas murieron mientras realizaban una excursión –uno por parada cardiorespiratoria y otro tras un desvanecimiento del que se desconocen las causas–y la deportista Marta Jiménez pereció practicando salto base.
El senderismo sigue siendo la actividad con más rescates. “Es la que más práctica la gente. Desde tropiezos o agotamiento hasta extravíos, todo entra en la estadística”, explica Franco. Y aunque las competencias en prevención recaen en el Gobierno de Aragón, desde la FAM insisten en que la clave está en la concienciación: “La gente tiene que estar capacitada, equipada y en condiciones físicas. No se puede improvisar en la montaña”. Este verano, la tendencia se mantiene y el mayor número de rescates han sido practicando esta actividad, seguido del montañismo y el barranquismo.
Desde Montaña Segura, su directora, Marta Ferrer, insiste en lo mismo: “Nos gustaría que hubiera menos rescates, pero no hay un único problema ni una única solución”. A través de la campaña impulsada por el Gobierno de Aragón, la FAM y Aramon, trabajan para sensibilizar a los deportistas. Especialmente a los senderistas, donde los errores básicos siguen repitiéndose: “No llevar agua suficiente, no consultar la previsión meteorológica o no contar con un GPS descargado son fallos habituales que provocan muchos rescates”.
Ferrer recuerda que muchas intervenciones podrían evitarse con una simple vuelta a tiempo: “Hay bastantes rescates donde las personas no tienen lesiones. Se habían perdido o agotado. Si te despistas y sigues andando, o si estás cansado y no das la vuelta, es fácil acabar en un problema”.
También apunta que la mayoría de accidentes graves en actividades más técnicas como la alta montaña o el barranquismo no se deben tanto a la falta de conocimientos como al exceso de confianza: “Son personas con experiencia que, por ello mismo, se saltan pasos básicos. Lo que vemos es que se empieza la casa por el tejado”.
La mayoría de las personas rescatadas este verano en Aragón proceden de fuera de la comunidad, un patrón que, según Javier Franco, presidente de la Federación Aragonesa de Montaña, se repite cada año: “El 80% de los accidentados no son aragoneses”. Así lo confirman también los datos de este verano, que reflejan una notable presencia de montañeros y senderistas de otras comunidades como Cataluña, Madrid, Navarra o el País Vasco, así como numerosos visitantes internacionales. Franco atribuye esta tendencia al “efecto llamada” de los Pirineos, que atraen a un público amplio y diverso, a menudo sin suficiente formación ni conocimiento del terreno y expone que los gobiernos autonómicos de origen también deberían desarrollar campañas para informar a las personas que realicen actividades con seguridad.
Desaparecido en Ordesa
La Guardia Civil continúa la búsqueda de un joven estadounidense desaparecido el 14 de julio en la zona de Ordesa. Un amigo del joven dio aviso a la Guardia Civil de que Henderson no había regresado en el vuelo del día 12 a su lugar de residencia, tal y como estaba previsto, según han informado desde la Benemérita a Europa Press.
Por ello, desde entonces, la Comandancia de la Guardia Civil de Huesca mantiene activo un operativo de búsqueda en el que participa personal de todas las unidades del GREIM de la provincia altoaragonesa, así como de Navarra, Zaragoza, Teruel y Lérida.
También la Unidad Aérea de Benasque y se ha sumado el grupo especial de actividades Subacuáticas (GEAS) de la Zona de Aragón. Hasta miércoles, 30 de julio, el dispositivo de búsqueda ha resultado negativo, según han precisado las citadas fuentes.