
La ola de incendios, vista desde imágenes de satélite
Las imágenes del 17 de agosto permiten observar densas columnas de humo que se desplazan hacia el norte y el este, cubriendo amplias zonas del Golfo de Vizcaya e incluso alcanzando el Levante español
¿Qué zonas se han quemado más? Los datos y mapas de los incendios de 2025
Las imágenes del satélite europeo Copernicus permiten hacerse una idea de la enorme extensión de los incendios que arrasan la península desde hace días. Desde el inicio de los fuegos está funcionando el Servicio de Cartografía de Emergencias Copernicus de la Unión Europea, que utiliza imágenes satelitales y otros datos geoespaciales para generar mapas gratuitos y de respuesta rápida ante desastres en todo el mundo.
Gracias a esta herramienta se pueden ver imágenes como esta, capturada por la misión Sentinel-3 de Copernicus el pasado domingo 17 de agosto.
Imagen de satélite del 17 de agosto de 2025
La imagen de Francia, España y Portugal está dominada por las columnas de humo de los incendios. Según explica la institución, se pueden observar densas columnas de color gris que se desplazan hacia el norte y el este con los vientos predominantes, fusionándose con sistemas nubosos sobre el Atlántico y cubriendo amplias zonas del Golfo de Vizcaya. Parte de este humo puede observarse incluso en la zona mediterránea alcanzando el Levante español.
Los incendios forestales como estos no solo ponen en peligro la vida, como por desgracia ha ocurrido este mes de agosto, con cuatro fallecidos en España y tres en Portugal a causa de los incendios. También devastan la vida salvaje, los habitats, la agricultura y la propiedad, pero además degradan de forma severa la calidad del aire, con un efecto pernicioso en la salud humana.
El mapa a continuación muestra el sur de Europa, el norte de África y el Mediterráneo hasta su unión con el Mar Negro para señalar los focos activos de incendios (imagen superior) así como las concentraciones atmosféricas de monóxido de carbono (imagen inferior) el pasado día 17 de agosto. La contaminación del aire que respiramos con este compuesto de oxígeno y carbono puede provocar problemas de salud significativos.
Concentración de monóxido de carbono
Los focos de incendios se categorizan según su poder de radiación mediante datos obtenidos a través del conjunto de radiómetros de imágenes infrarrojas visibles VIIRS, obtenido mediante los satélites NOAA-20 y NOAA-21, en una colaboración entre la NASA y la NOAA, la Oficina Nacional de Administración Oceánica y Atmosférica de Estados Unidos.
El mapa de monóxido de carbono está basado en datos del Servicio de Seguimiento de la Atmósfera (CAMS) de la Comisión Europea. Este servicio proporciona información relacionada con la contaminación del aire y la salud, energía solar, gases de efecto invenadero o con el clima a nivel internacional. Para obtener esos datos, son esenciales los satélites Copernicus Sentinel-5P así como el Copernicus Sentinel-4 y el Sentinel-5.
La imagen final, obtenida el 16 de agosto por la misión Copernicus Sentinel-2, es una vista en colores que utiliza los canales infrarrojos de onda corta del satélite para reseñar los fuegos activos en el noreste de Portugal y en el noroeste de España. También está disponible la versión correspondiente con colores reales, que permite obtener una visión más cercana de las zonas afectadas.
Fuegos en la frontera entre Galicia y Portugal
Mientras que la prioridad inmediata en cualquier emergencia por incendios es la de extinguir las llamas y proteger a las comunidades, el desafío a largo plazo es que se espera que este tipo de eventos sucedan cada vez con mayor frecuencia e intensidad según se profundiza la crisis climática.
El fuego está reconocido como una variable esencial del clima y juega un papel fundamental en el sistema de la Tierra influenciando la composición atmosférica, los ciclos de carbono y los ecosistemas. Para entender mejor y hacer un seguimiento de estas dinámicas, la Agencia Espacial Europea lleva a cabo observaciones vía satélite a través de distintas iniciativas contra el cambio climático en relación con los incendios como ‘Fire Project‘ o ‘XFires Project‘.