
España y Reino Unido prevén retirar la verja de Gibraltar en enero de 2026
Los avances en la negociación del acuerdo entre los dos países apuntan a que esté ratificado para diciembre, aunque Bruselas no descarta demoras, según El País
Qué supone el acuerdo entre España y el Reino Unido sobre el nuevo estatus de Gibraltar tras el Brexit
España y Reino Unido planean eliminar la verja que separa el peñón de Gibraltar de La Línea de la Concepción con la próxima aprobación del acuerdo entre los dos países sobre el nuevo estatuto de la Roca, que Madrid y Londres pretenden tener listo en octubre, según El País. El acuerdo se podría ratificar en diciembre y la verja que separa los territorios retirarse ya el próximo enero, aunque Bruselas reconoce plantea que puede haber retrasos.
Las negociaciones para el nuevo estatuto del Peñón derivan de la salida de Reino Unido de la UE. La estrategia del Gobierno español en los últimos meses ha sido, en buena medida, ceder la iniciativa a Downing Street aprovechando la voluntad del nuevo primer ministro, Keir Starmer, de “resetear” las relaciones con la UE tras el Brexit, después de que el ministro de Exteriores, José Manuel Albares, protestase en octubre de 2024 por la renuencia británica a llegar a un entendimiento definitivo.
La táctica surtió efecto y el acuerdo político se anunció el pasado junio, si bien sujeto a la redacción de un texto vinculante como el que ahora está cerca de ver la luz.
La negociación ha requerido el entendimiento entre cuatro actores —Madrid y Londres, pero también las autoridades de Bruselas y del propio Peñón— y ha tenido que superar las diferencias sobre cuestiones como la fiscalidad indirecta —el IVA— y los controles Schengen sobre circulación de personas, mercancías y servicios.
La colonia británica, cuya soberanía reclama España desde 1713, quedó fuera de los acuerdos sobre la salida del Reino Unido de la Unión Europea (UE), que se hizo efectiva el 31 de diciembre de 2020. Quedó en manos de los gobiernos llegar a un entendimiento sobre las relaciones en la nueva etapa con el objetivo de eliminar los controles de personas y bienes en la frontera física, donde la movilidad es constante, y a la vez asegurar la seguridad del mercado y la zona de libre circulación de personas de la UE.
Los principales enquistamientos han tenido que ver con el aeropuerto del Peñón, para el que España reclamaba un convenio de uso conjunto así como el papel de los agentes de Frontex y de las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad españoles en esa frontera aeroportuaria para los viajeros procedentes de terceros países, y la igualdad de trato de los trabajadores transfronterizos en la jubilación, extendiendo los beneficios del Community Care británico (que suponen unos 465 euros más) a ese colectivo. También las cuestiones relativas a la verja, que en la práctica supone una frontera exterior de la UE.
El acuerdo definitivo establece, según El País, que en el futuro se aplique una unión aduanera entre la UE y Gibraltar y pone fin a los controles de mercancías. También anticipa la creación de un impuesto similar al IVA —que no existe actualmente en Gibraltar— que se aplique también al tabaco para no perjudicar al Campo de Gibraltar, cuya economía está muy vinculada a la del Peñón.