Penas mínimas de hasta ocho años de cárcel para cinco hombres que violaron en grupo a tres mujeres en Castelldefels
Los condenados alcanzan un pacto con la Fiscalía y las víctimas para indemnizar a las mujeres y aceptan entre cuatro y ocho años de prisión, pero no son condenados por grabar en vídeo y compartir las violaciones
La Fiscalía pide hasta 53 años para el “grupo criminal” de Castelldefels acusado de tres violaciones múltiples
Emborracharon a tres mujeres, se aprovecharon de su baja autoestima y las violaron en 2021. Así lo han admitido este lunes cinco hombres de Castelldefels (Barcelona), que han alcanzado un pacto con la Fiscalía y las víctimas y han aceptado penas mínimas que suman entre tres años y once meses y ocho años y cinco meses de cárcel.
La rebaja de penas fruto del pacto es llamativa, si bien es algo cada vez más habitual en los casos de violencia sexual. Por el lado de los acusados, porque se exponen a las altas penas con las que se castigan este tipo de delitos, y por el lado de las víctimas, para obtener una reparación sin tener que pasar de nuevo por un juicio que obliga a rememorar el trauma.
En el caso de los acusados de Castelldefels, la Fiscalía les pedía inicialmente entre 53 y 28 años de cárcel. Además de una rebaja de las penas iniciales por los delitos de agresión y de grupo criminal, el acuerdo final ha comportado que desaparezca del caso el delito de revelación de secretos por el que fueron procesados por enviar vídeos de las violaciones a un grupo de Whatasapp.
En conjunto, los acusados que han aceptado penas más altas se han conformado con 8 años y 5 meses de cárcel y 8 años y 3 meses de cárcel por tres delitos de agresión sexual y uno de grupo criminal para atentar contra la libertad sexual de las mujeres. Otros dos acusados han pactado penas de seis años de cárcel, mientras que el último ha admitido 3 años y 11 meses.
Además de mostrar arrepentimiento durante la sesión y beneficiarse de la atenuante de “confesión tardía” (han pasado cuatro años desde los hechos), para la rebaja de penas ha sido decisivo que los violadores abonaran sendas indemnizaciones de 30.000, 37.827 y 33.205 euros a las víctimas.
“Lo siento mucho por las molestias”; “pido disculpas a ellas y a sus familias, he intentado hacer lo posible para recaudar el dinero”; “quiero mostrar mi total y absoluto arrepentimiento y pedir perdón a las víctimas de corazón”; “me gustaría pedir perdón”; “quiero pedir perdón a las víctimas”, han manifestado los acusados ante el tribunal.
El caso del grupo de cinco hombres que agredieron sexualmente a tres mujeres en Castelldefels durante la pandemia en 2021 es una de las causas más graves de violencia sexual en los últimos tiempos en Catalunya. Cuatro de los cinco acusados permanecían en prisión preventiva al constatar en ellos los jueces un “menosprecio y cosificación de las mujeres impropios del siglo XXI”.
En esencia, a falta de formalizarse la sentencia del caso (que no se podrá recurrir al ser fruto de un acuerdo), los acusados han admitido que engañaron y violaron en grupo a tres víctimas tras emborracharlas y aprovechándose de su baja autoestima. Una de ellas, además, padecía una enfermedad neurológica, lo que aumentaba su vulnerabilidad ante un grupo de cinco hombres.
No solo violaron a las mujeres. La investigación de los Mossos d’Esquadra de la comisaría de Gavà había sacado a la luz los mensajes que los cinco hombres se enviaban a un grupo de Whatsapp emulando a los violadores del caso conocido como La Manada de Pamplona. Se llamaba ‘K-Team Manada Returns’. Los agresores de Gavà incluso cambiaron la foto del grupo por una de los sevillanos violadores de una joven durante los Sanfermines.
La cantidad de mensajes incautados al grupo da cuenta de su actividad criminal vulneradora de la libertad sexual de las mujeres y de su intimidad, al grabar las agresiones en vídeo y compartirlas, aunque ha quedado impune.
De una de las víctimas, ellos mismos destacaron que no se tenía en pie debido a la ingesta de alcohol y que la habían “reventado”. En el grupo los hombres también se instaron a no avisar a la policía: “Como alguno la líe y se ponga nervioso y no diga la verdad nos vamos todos a la cárcel”. Incluso uno de ellos mostró sus dudas de terminar ante un juez: “Te pasaría el teléfono de una que es muy guarra pero no me fío porque la veo capaz de denunciarnos”.
