Idealista renuncia a comprar Kyero y acusa a Competencia de intentar regular su estrategia comercial a futuro

El consejo de administración de Idealista ha renunciado a la adquisición del portal británico Kyero, cuya compra anunció en diciembre, tras los requisitos de la Comisión Nacional de los Mercados y la Competencia (CNMC), que habrían hecho “inviable” la operación, según señala la compañía en un comunicado. En la misma nota, un portavoz de la empresa señala que no descartan que este organismo “haya querido aprovechar la compra de un portal más pequeño para regular la estrategia comercial de Idealista en el futuro, tuviera o no relación con Kyero”. Desde el portal inmobiliario no han aclarado cuáles son los requisitos que establecía la autoridad.

Idealista tenía la intención de adquirir Kyero, un portal inmobiliario para clientes internacionales que buscan vivienda en España, Francia, Italia y Portugal. Cuando se comunicó la decisión de arrancar la operación, en diciembre de 2024, esta empresa, fundada en 2003 y con sede en Reino Unido, contaba con 33 empleados, que atendían a más de 7.000 agentes inmobiliarios.

La compra estaba pendiente de la aprobación de las autoridades de competencia, tanto españolas como portuguesas, que también habían planteado “serias dudas” sobre la operación, a cuenta de la posibilidad de que no permitiese la competencia efectiva.

Finalmente, según ha comunicado Idealista, la compañía habría estado “negociando con la autoridad española durante varios meses para tratar de encontrar una solución razonable que acomodara las exigencias de la CNMC”. Unas exigencias que, a juicio del portal propiedad del gigante fondo de inversión Cinven, “excedían el contexto de la operación y limitaban de forma desproporcionada la actividad comercial” de la empresa, “impidiéndole operar en el mercado con normalidad”.

Idealista notificó a la CNMC su intención de adquirir Portal47 Ltd, la sociedad gestora de Kyero, a principios de abril de este año. La Comisión tiene un plazo tasado de un mes para autorizar las operaciones de concentración en esa fase 1, pero se para el reloj si el organismo requiere información adicional, necesaria para emitir una resolución. En este caso, la Comisión no ha publicado ningún informe en ese sentido, sino que ha sido la propia compañía quien ha desistido tras una negociación que “provocó una demora material en el cierre de la operación que perjudicaba los intereses de las partes”, apuntan en la nota.

Además, desde la compañía apuntan que “no parece razonable que aspirando a un mercado único europeo que compita con otros mercados globales haya 52 autoridades de la competencia a nivel nacional y regional”. Algo que, indican, supone un lastre para el sector tecnológico europeo frente al de otros mercados.