Hungría sigue los pasos de Trump y declara como terrorista al movimiento antifascista Antifa

Hungría sigue los pasos de Trump y declara como terrorista al movimiento antifascista Antifa

Expertos legales ven con escepticismo el anuncio de Orbán porque es un conjunto difuso de grupos e ideas antifascistas que no tiene líderes ni estructura

Trump designa a Antifa como organización terrorista, a pesar de que ni siquiera es una organización

El primer ministro húngaro, el ultranacionalista Viktor Orbán, ha anunciado este viernes que su Gobierno ha declarado como terrorista al movimiento antifascista Antifa, siguiendo los pasos del presidente de Estados Unidos, Donald Trump. En declaraciones a la radio pública Kossuth, justificó la medida en “la creciente violencia” en la vida pública y política, subrayando que “el Gobierno debe ser el que demuestra que Hungría quiere ser la isla de la paz”, en un mundo cada vez más agresivo. En Hungría no se han producido incidentes violentos recientemente.

Trump anunció hace nueve días la designación de Antifa como una “gran organización terrorista” tras el asesinato del activista ultraconservador Charlie Kirk el pasado 10 de septiembre.

Hace una semana, cuando anunció que calificaría de terrorista al movimiento antifascista, Orbán mencionó el caso de la activista italiana Ilaria Salis, que en 2023 fue detenida y acusada en Hungría de agredir a participantes en una marcha neonazi.

En su mensaje de este viernes, el primer ministro se refirió de forma generalizada a que está aumentando la violencia en el mundo por la inmigración o la situación económica. Orbán dijo que el Gobierno elaborará una lista nacional sobre las organizaciones y personas que, a su juicio, forman parte de Antifa.

Antifa es un movimiento social internacional en el que se integran grupos opositores al fascismo, el racismo, el antisemitismo, el nacionalismo étnico e ideologías de ultraderecha. Agrupa a una gran variedad de grupos activistas, algunos de ellos pacifistas y otros más violentos.

Expertos legales húngaros ven con escepticismo una posible designación como “organización terrorista” porque Antifa no tiene líderes, miembros y estructura, sino que es un conjunto difuso de grupos e ideas antifascistas que actúan de forma descentralizada y autónoma.

Hungría solicitó la semana pasada a la Comisión Europea que Antifa sea declarado “organización terrorista”. El grupo Patriots for Europe, en el que está incluído Vox, también han solicitado al Parlamento Europeo que también siga los pasos de Orbán y Trump.