Los ministerios y el Senado mantienen un sistema mixto con pagos en metálico para determinados gastos

Los ministerios y el Senado mantienen un sistema mixto con pagos en metálico para determinados gastos

Los anticipos para viajes y manutención se entregan en efectivo a los miembros del Gobierno, aunque también tienen la opción de que el dinero se reembolse por transferencia bancaria. El Senado también entrega las dietas de desplazamiento en sobres con dinero

El PSOE informa al Supremo de que Santos Cerdán pasó 65.000 en gastos en sus cuatro años como ‘número tres’

En los tiempos del bizum, de las tarjetas de crédito en teléfonos móviles o incluso relojes inteligentes, y de las transferencias inmediatas, los ministerios y el Senado mantienen la entrega de dinero en efectivo para abonar algunos gastos de sus representantes. Cuando un ministro viaja, su equipo puede disponer de un dinero de la caja para pagar los gastos que tengan (cenas, taxis, etc.). Según fuentes oficiales de Moncloa, todos los ministerios disponen de esa opción. No obstante, la práctica en algunos departamentos es que los ministros y sus equipos corren con los gastos que luego les reembolsan en sus cuentas bancarias. En ambos casos tienen que presentar tickets y documentos que acrediten esos costes.

El pago en efectivo, por tanto, es una práctica habitual en la Administración Pública en un momento en el que el PP está arremetiendo contra Pedro Sánchez usando las imágenes de sobres con billetes entregados en Ferraz al exsecretario de Organización del PSOE, José Luis Ábalos, o los pagos en metálico a su sucesor, Santos Cerdán, investigados por corrupción. El Senado, por ejemplo, utiliza esa fórmula para pagar las dietas por desplazamientos tanto dentro de España como en el extranjero de los parlamentarios. Se trata de 150 euros al día para los viajes internacionales y de 120 euros diarios para los nacionales.

Fuentes parlamentarias explican que el objetivo es que los senadores dispongan de efectivo para los gastos que puedan derivarse de esos viajes institucionales, que en ocasiones se realizan con poca antelación. Lo que sostienen es que cada pago tiene un expediente económico correspondiente y está autorizado por la Mesa del Senado, así como comunicado a la Agencia Tributaria.

Los senadores, no obstante, no tienen que devolver el dinero en caso de que el importe sea superior al que finalmente necesitan. En el caso de los ministerios es distinto: los anticipos de caja se tienen que justificar posteriormente y el dinero que no haya sido empleado, se tiene que reingresar en la caja. También las devoluciones a través de transferencia deben estar debidamente justificadas.

En el Senado reconocen que no les aplica la normativa en materia de prevención de blanqueo de capitales que establece un máximo de 1.000 euros para las transacciones en efectivo al tratarse de una administración pública. En el Ministerio de Hacienda, por ejemplo, explican que “se puede pagar en efectivo para temas de intendencia del ministerio o en algunos casos también para adelanto de dietas”, pero que la cifra suele oscilar en torno a los 200 euros. No obstante, precisan que la regla general es la transferencia. “Nosotros adelantamos los gastos y nos los pagan por transferencia. A la mayoría de gabinete es así, pero para ciertos gastos protocolarios hay una caja de efectivo”, explican en otro ministerio.

De la cerca de decenas de fuentes gubernamentales consultadas, se extrae que los dos métodos se utilizan indistintamente. Algunas fuentes apuntan a que lo habitual es que antes de los viajes se les entregue un anticipo del dinero. Los desplazamientos (trenes o aviones) se contratan a través de agencias de viajes, pero las secretarías de los ministerios tienen una caja de la que sale el dinero para otros gastos, como los taxis o las comidas. “Los pequeños gastos de viaje se reembolsan en cash”, explica una fuente conocedora del sistema.

Los partidarios de utilizar ese sistema sostienen que así no tienen que adelantar el dinero desde sus propias cuentas bancarias, que puede suponer un quebranto económico en determinados casos hasta que el dinero se reembolsa. En los casos en los que los ministros o sus equipos pagan sus gastos, lo normal es que después se devuelva a través de transferencia. Y a lo que apuntan las fuentes consultadas es que la fórmula idónea sería disponer de tarjetas de crédito institucionales.

“Pagar con dinero en efectivo no es ilegal”, ha respondido la portavoz del Gobierno, Pilar Alegría, a una pregunta sobre los pagos en metálico del PSOE a José Luis Ábalos o Santos Cerdán y ha recordado que es una práctica habitual de empresas e instituciones. “Siempre tiene registro contable”, ha agregado Alegría, que ha asegurado que el informe de la UCO de la Guardia Civil acredita que no ha habido financiación irregular en el PSOE.