
«Moreno Bonilla, fuera de Sevilla»: una multitudinaria manifestación pide dimisiones por el escándalo de los cribados de cáncer
Cententares de personas piden la dimisión del presidente andaluz y de la consejera de Salud por los fallos en la comunicación de resultados de mamografías en al menos dos mil mujeres
El Gobierno andaluz se da otros dos meses de plazo para revisar a las 2.000 mujeres con posible cáncer de mama
Cientos de personas se han convocado este miércoles en la céntrica avenida de la Constitución, en el corazón histórico de Sevilla, para protestar por el fallo en la comunicación de resultados de mamografías en al menos dos mil mujeres.
Con gritos de “Moreno Bonilla, fuera de Sevilla” y peticiones de dimisión de la consejera de Salud, Rocío Hernández, los convocados frente a la sede del Servicio Andaluz de Salud han recibido el respaldo de sindicatos (CCOO, CSIF o UGT), partidos políticos (PSOE, Por Andalucía, Adelante Andalucía…), organizaciones como Facua o la Marea Blanca sanitaria y, sobre todo, la Asociación de Mujeres con Cáncer de Mama (Amama), que fue la que destapó los problemas en el programa de cribado del cáncer de mama.
El deterioro de la sanidad pública en Andalucía ha sido uno de los argumentos políticos recurrentes de los partidos de izquierda en su oposición a Juan Manuel Moreno, pero pese al hartazgo ciudadano por algo tan primario como conseguir cita con el médico de cabecera, lo cierto es que no ha logrado capitalizar (ni rentabilizar) este malestar.
Cientos de personas protestan en Sevilla por el escándalo de los cribados de cáncer de mama
Pero la crisis provocada por el retraso en el diagnóstico a 2.000 mujeres con sospecha de padecer cáncer de mama está suponiendo un antes y un después, como demuestra que le ha dado la vuelta a la agenda política andaluza –ahora sólo se habla de esto– y que ya ha se ha trasladado a la calle.
El propio Gobierno andaluz ha reconocido este miércoles que estamos ante la crisis “más delicada y complicada” que sufre desde que Moreno es presidente, que además de pedir disculpas ha redirigido el tiro a la Consejería de Salud asegurando que“personalmente” se enteró del problema “demasiado tarde”. El calibre del escándalo generado ya le ha llevado a garantizar que se van a “depurar responsabilidades”, además de poner en marcha un plan de choque que, eso sí, se da todavía hasta diciembre para revisar a todas las afectadas.
Al margen de que la deriva política ya ha llevado a la oposición de izquierdas a solicitar una comisión de investigación en el Parlamento, desde la propia Amama se baraja la presentación de una demanda colectiva por los posibles delitos de “lesiones por imprudencia”, “dejación de atención sanitaria” e incluso “homicidio imprudente”. En paralelo, el Defensor del Paciente, IU y Adelante Andalucía ya se han ido ante la Fiscalía del Tribunal Superior de Justicia de Andalucía (TSJA) para presentar sus propias denuncias.