Detenidos siete ultras por agredir a varios agentes en el partido entre el Real Oviedo y el Club Deportivo Mirandés en junio

La euforia del histórico ascenso del Real Oviedo a Primera División ha traído consigo la detención de siete personas y su presunta participación en los graves incidentes que tuvieron lugar en el conocido como ‘corteo’ o recibimiento al autobús del equipo el pasado 21 de junio en los aledaños del Carlos Tartiere, en Oviedo, que terminaron con varios agentes agredidos con botellas de cristal. Ese día se celebraba la vuelta del playoff contra el Club Deportivo Mirandés y los altercados ocurridos empañaron la jornada deportiva.

La Policía Nacional, en una operación coordinada por la Comisaría General de Información y ejecutada por la Brigada Provincial de Información de Oviedo con apoyo de Valladolid y Madrid, ha confirmado un patrón de violencia organizada: los altercados no solo involucraron a seguidores locales, sino que contaron con la participación de grupos ultra ‘hermanados’.

Cuatro detenidos en Oviedo

Según ha informado la Policía Nacional en la mañana de este martes, las detenciones se han producido en Oviedo (cuatro personas), Valladolid (dos) y Madrid (una), lo que demuestra la conexión y el desplazamiento de estos grupos para generar altercados, un factor que las autoridades llevan tiempo señalando como crítica.

Según informa la Polícia Nacional, tres de las personas arrestadas son miembros de la facción ultra del Real Valladolid, ‘Valladolid 1984’, conocidos por su vínculo con los ultras oviedistas de ‘Symmachiarii’. Su presencia en Oviedo no era casual, sino parte de una red de apoyo para la confrontación.

Consecuencias Penales

Los incidentes se produjeron durante la concentración de aficionados para recibir el autobús del Real Oviedo, momento en el que, en las proximidades del estadio, un grupo de ‘Symmachiarii’ intentó derribar el vallado de seguridad. La situación se agravó cuando comenzaron a golpear y lanzar objetos contundentes, incluidas botellas de vidrio, contra la dotación policial y que acabó con dos agentes de la Unidad de Intervención Policial (UIP), que trataban de mantener el orden y la seguridad de la ciudadanía, lesionados.

A los siete detenidos, ya puestos a disposición del Juzgado de Instrucción n.º 2 de Oviedo, se les imputan delitos de desórdenes públicos y atentado contra agente de la autoridad, lo que implica responsabilidad penal grave.

Multas de hasta 60.000€ y prohibición de Acceso

Además de las responsabilidades penales, la Policía Nacional ha identificado a un total de diez personas (los siete detenidos más otras tres) que han sido propuestas para sanción administrativa. Estas personas se enfrentan a multas por infracción de la Ley 19/2007 contra la violencia, el racismo, la xenofobia y la intolerancia en el deporte. Una normativa que contempla sanciones económicas de hasta 60.000 euros para las faltas graves, además de la crucial prohibición de acceso a los terrenos de juego.

Esta medida administrativa busca apartar de los estadios a quienes anteponen la violencia a la pasión deportiva, buscando devolver la seguridad y la convivencia a un evento que debería ser una fiesta para la afición, y no un escenario de batalla. La investigación continúa abierta y no se descartan nuevas detenciones en los próximos días.