Periodistas de À Punt y un consejero critican que emitiera corridas de toros durante la manifestación del aniversario de la dana

Los trabajadores de la radiotelevisión pública valenciana echan humo con la programación escogida por la cadena pública en el día de las multitudinarias protestas por el aniversario de la dana. Numerosos periodistas y hasta un miembro del Consejo de Administración del ente público critican que la televisión emitiera un programa de corridas de toros mientras miles de personas reclamaban la dimisión del presidente de la Generalitat, Carlos Mazón, en el centro de València.

La televisión valenciana emitió la feria de toros de Alicante de 1997, con Enrique Ponce y Vicente Barrera, en lugar de las masivas protestas que tienen lugar en la capital por el aniversario de la dana, pese a contar con equipos de periodistas y cámaras presentes en la manifestación. La cadena pública se limitó a una cobertura en web y redes sociales durante la protesta, con más de 50.000 personas en las calles, según la delegación del Gobierno. La decisión provocó numerosos reproches durante la marcha, incluso durante la lectura del manifiesto, y este domingo ha derivado en un aluvión de críticas de la plantilla. Decenas de trabajadores han compartido la protesta en redes sociales a través de la etiqueta “#LaPlantilladÀPNoCalla”.

El representante de los municipalistas Ens Uneix en el Consejo de Administración, Ricard Gallego, también ha censurado la cobertura. “Pedimos una explicación pública por parte de la dirección de la cadena, que nos diga a todos los valencianos y valencianas cuáles fueron los criterios que llevaron a no interrumpir la reemisión de una corrida de toros de 1997 para dar cobertura de un acontecimiento histórico en la ciudad de València”, señalan en un comunicado. “No nos sirve de nada una televisión pública que no haga conexiones en directo de acontecimientos tan importantes como estos”, denuncian.

“Los municipalistas llevaremos el asunto al próximo Consejo de Administración del ente público y esperamos que se nos dé una explicación clara y convincente de las razones que llevaron a no emitir, en toda la tarde, la concentración multitudinaria”, expresa Ens Uneix, que subraya su “desacuerdo con esta forma de gestionar la radiotelevisión pública valenciana”. “Creemos que À Punt tiene la responsabilidad de garantizar una información plural y de servicio público, especialmente en momentos tan importante para la sociedad valenciana como los que estamos viviendo”, concluyen.

La manifestación por la dimisión de Carlos Mazón ha terminado en la plaza de la Virgen de València.

Compromís denuncia “manipulación de cifras” de la Policía Local

El recuento de asistentes que trasladó el Ayuntamiento de València, muy alejado de la Delegación del Gobierno, también ha generado controversia. La coalición Compromís habla de manipulación de cifras por parte del gobierno local de PP y Vox a través de la Policía Local, que rebajó la asistencia de 50.000 a 32.000 personas. “La cifra que ofreció ayer la Policía Local de València sobre el número de asistentes en la manifestación es una auténtica vergüenza. La de ayer fue, junto con la primera, la manifestación con más apoyo para exigir la dimisión del presidente de la Generalitat Valenciana, Carlos Mazón. Incluso parece corta la cifra que ofrece la Delegación del Gobierno de 50.000 personas, cuando hablamos de que la cabecera de la manifestación entraba en la Plaza de la Virgen mientras aún salían las últimas personas desde San Agustín”, denuncia la portavoz valencianista, Papi Robles.

“Por si fuera poco, la televisión pública valenciana optó por emitir una corrida de toros de 1997 en lugar de dar voz en directo a las decenas de miles de valencianas y valencianos indignados con la actuación de la Generalitat y del Ayuntamiento de València”, prosigue la portavoz.

La coalición lamenta “que el gobierno de María José Catalá trate de manipular y censurar la cifra real de manifestantes que, recordemos, llevan un año pidiendo la dimisión de un presidente mentiroso y desaparecido en la tragedia. Pero Catalá ha decidido ponerse del lado de quienes actuaron con negligencia, entre los que se encuentra su propio gobierno en los Pobles del Sud de València. Catalá es cómplice de mantener a Mazón como presidente, pero por mucho que intenten silenciar al pueblo valenciano, la calle es un clamor: ¡Mazón debe dimitir ya!”, sentencian.