El juicio contra el fiscal general pone el foco en el bulo de Miguel Ángel Rodríguez y cuándo empezó a difundirlo

El juicio contra el fiscal general pone el foco en el bulo de Miguel Ángel Rodríguez y cuándo empezó a difundirlo

El testimonio del jefe de gabinete de Ayuso está previsto para este martes por la tarde después de que una fiscal haya explicado que sus bulos sobre el caso empezaron a llegar mucho antes de lo que él ha reconocido

La Abogacía del Estado carga contra el juez Hurtado por su investigación “inquisitiva” al fiscal general: “Ha sido un proceso injusto”

El arranque del juicio contra el fiscal general por la filtración de un correo de la pareja de Isabel Díaz Ayuso ha servido para ubicar varias fichas en el tablero: las duras críticas de la Abogacía del Estado y la Fiscalía contra la investigación del juez Ángel Hurtado, el enfrentamiento directo entre la Fiscalía General y la Fiscalía de Madrid, y el papel protagonista que tuvo esos días el bulo de Miguel Ángel Rodríguez. Su declaración está prevista para este martes después de que varios testigos hayan deslizado una realidad que tendrá que explicar: si en la tarde del 13 de marzo de 2024 empezó a difundir mentiras sobre el caso mucho antes de lo que ha reconocido y basándose en un correo de la Fiscalía. 

Almudena Lastra es fiscal jefe de Madrid y es considerada uno de los testigos más valiosos para las acusaciones. Primero, porque se enfrentó al fiscal general mientras se confeccionaba una nota informativa del caso y, según su versión, llegó a preguntar abiertamente a Álvaro García Ortiz si él había filtrado la confesión del empresario a la prensa. Pero también ha reiterado, como ya hizo en instrucción, que los primeros ecos de los bulos del entorno de Ayuso llegaron a la Fiscalía mucho antes de lo que ha reconocido Rodríguez. 

“A las 20.26 me llama Iñigo Corral. Me dijo que le había llamado un periodista, [José Manuel] Romero, diciendo que el jefe de gabinete de la presidenta de la Comunidad de Madrid se estaba poniendo en contacto con periodistas diciendo que la Fiscalía había ofrecido un pacto al señor González Amador y había recibido órdenes de arriba de recibir ese pacto”.

En este fragmento de la larga declaración de Lastra este lunes en el juicio se esconden varias claves que se desarrollarán en los próximos días de juicio. “Iñigo Corral” es el jefe de prensa de su Fiscalía y las “20.26” es la hora de la tarde del 13 de marzo a la que fue advertida por él de que Miguel Ángel Rodríguez estaba llamando a periodistas para difundir el gran bulo del caso: las “órdenes de arriba”. Que la Fiscalía había ofrecido un pacto a la pareja de Ayuso para cerrar su caso de fraude fiscal de forma discreta, pero que la cúpula del Ministerio Público lo había impedido. 

Miguel Ángel Rodríguez es uno de los testigos más esperados de este juicio y comparecerá, si no hay nuevos retrasos, en la tarde de este martes. El tribunal comprobará si su declaración de instrucción cuadra con la del juicio y con la de otros testigos. En enero, ante el juez Hurtado, el jefe de gabinete de Ayuso reconoció que González Amador le mandó un correo del fiscal Julián Salto en la mañana del 12 de marzo, cuando elDiario.es destapó el caso, pero añadió que no hizo “nada” con el correo hasta que, pasadas las 22.20 horas de la noche del día siguiente, el empresario le dio permiso para moverlo. Lo envió a decenas de periodistas de forma manipulada y ofreciendo una versión distorsionada de los hechos. 

El testimonio de Lastra, que ubica las alarmas internas de la Fiscalía por sus bulos dos horas antes de lo que él reconoce, tendrá una primera prueba de fuego en la mañana de este martes cuando comparezcan los jefes de prensa de la Fiscalía General y la Fiscalía de Madrid, que en fase de instrucción explicaron lo mismo: que a partir de las siete de la tarde ya empezaron a recibir llamadas de periodistas alertando de los movimientos del jefe de gabinete de Ayuso. 

Los mensajes que enviaba Rodríguez a esas horas no eran el mismo que envió después junto con el correo, pero iban por el mismo camino: “Primero el fiscal le ofreció negociar; después al fiscal le prohibieron negociar con él. Es todo turbio y feo”. Si los responsables de comunicación de ambas fiscalías ratifican este martes lo que dijeron ya en fase de instrucción, la pelota estará en el tejado del jefe de gabinete de Isabel Díaz Ayuso y tendrá que explicar por qué omitió ese detalle en su declaración de instrucción. Entonces afirmó ante Hurtado que él se limitó a reaccionar a informaciones que habían publicado otros medios de comunicación, y siempre con el permiso de González Amador. 

Son algunas de las incógnitas que tendrá que despejar el jefe de gabinete de Ayuso: cómo y a quién difundió información manipulada del caso y si lo hizo con permiso de González Amador en todo momento. La defensa de García Ortiz considera que es una prueba más de que el empresario fue el primero en romper la confidencialidad de esa cadena de correos. 

Ninguno de los testigos ha afirmado que esa versión de los hechos que primero difundió Rodríguez y después algunos medios era verdadera. “Bulos”, “falsedades”, “se estaba tergiversando un correo de forma absolutamente falsa”. Son algunas de las expresiones usadas este lunes por Pilar Rodríguez, fiscal provincial de Madrid que ha comparecido como testigo después de haber estado imputada durante meses. “Una difamación”, ha añadido Diego Villafañe.

La acumulación de testigos que tendrían que haber declarado este lunes y que se han pasado al martes tras los largos y duros alegatos de la Abogacía del Estado y la Fiscalía contra Hurtado pone en duda si Alberto González Amador, pareja de Isabel Díaz Ayuso y denunciante del caso, comparecerá este martes o si tendrá que retrasarse al miércoles. 

Choque entre fiscalías y una reunión el día 12

La primera jornada de este juicio también evidenció la enorme tensión entre las subalternas de García Ortiz en la Fiscalía de Madrid. Almudena Lastra, enfrentada desde hace meses al fiscal general, reiteró en varias ocasiones que ella no era partidaria de ofrecer ninguna información sobre la existencia de una denuncia por fraude fiscal contra González Amador tras la exclusiva publicada por este periódico. “¿Vio la noticia de elDiario.es?”, le preguntó el abogado de González Amador. “Me la reenvió el jefe de prensa diciendo ‘Socorro, ¿esto es nuestro?’ Le dije que era nuestro pero que sobre este asunto no íbamos a dar ninguna información”. 

Insistió, además, en que la mañana del 14 de marzo de 2024, cuando la Fiscalía se movilizó para desmentir las tergiversaciones que había difundido el equipo de Ayuso, tuvo una conversación telefónica con García Ortiz en la que hablaron del comunicado que la Fiscalía publicó sobre estos hechos. La fiscal superior afirmó que tras leer las informaciones en prensa no le dio “ni los buenos días” y le espetó: “Has filtrado los correos”. Según su relato, García Ortiz dijo que eso no importaba, algo que se le “grabó en el alma”. 

Previamente, Lastra había hecho alusión a otra conversación mantenida en la noche del 13 de marzo, en plena crisis informativa provocada por el bulo, con Pilar Rodríguez, fiscal jefa de Madrid. “Ella me dijo que se los había mandado [los correos del fiscal del caso con la defensa de González Amador] al fiscal general. Y me quedé pasmada. Le dije: los van a filtrar”. Rodríguez, por su parte, defendió que “no hubo clandestinidad” al rendir cuentas a sus superiores sobre esos correos que centran la acusación contra el fiscal general. Y calificó de “exabrupto” la acusación de Lastra de una supuesta filtración. “Jamás me representó que nadie del Ministerio Fiscal vaya a proceder a hacer una filtración”, añadió. 

Además, la fiscal jefe provincial preguntó en tono de reproche: “¿Álvaro, esto lo has filtrado tú?”. “Eso ahora no importa”, afirmó Lastra que le había dicho García Ortiz. La fiscal no ofreció más pruebas que su testimonio. Sí ha sido precisa al hablar de un encuentro que tuvo con varios fiscales, la propia Pilar Rodríguez y Julián Salto el mismo 12 de marzo al mediodía. Después de hablar del caso, ya preparados para coger el ascensor y según ha deslizado el propio Salto y negado Rodríguez, hablaron de que esas negociaciones existían. Dos horas después, una fuente de esa Fiscalía contaba esa información sobre los pactos a un periodista de El País. Día y medio antes de que lo supiera el fiscal general.