La importancia del directo
Esta semana ha tenido lugar un acontecimiento de enorme relevancia, el juicio al fiscal general, que no ha sido emitido en directo. La decisión la ha tomado la propia Sala del Tribunal Supremo, consciente del impacto que tiene la imagen en tiempo real
La retransmisión en directo del funeral laico de Estado por las víctimas de la Dana el pasado 29 de octubre demostró el fracaso del Partido Popular en su intento desesperado de culpar al Gobierno central de lo sucedido. La dignidad de las víctimas, su rabia, la asistencia de un Presidente de la Generalitat que nadie quería allí, casi escondido, nos mostró en tiempo real que su única salida era la dimisión.
Al funeral siguió una declaración del todavía Presidente de la Generalitat, Carlos Mazón, emitida en directo, en la que a pesar de anunciar su renuncia, abundó en el relato diseñado un año antes para culpar a Pedro Sánchez y erigirse él en el artífice de la reconstrucción. Y como colofón, las imágenes de la Comisión de Investigación que en el Congreso de los Diputados investiga lo sucedido, con víctimas que saben muy bien quién podría haber evitado tantas muertes, compareciendo con enorme dignidad frente a unos diputados del PP que se han comportado de manera tan indigna como el propio Mazón.
Y en paralelo, esta semana ha tenido lugar otro acontecimiento de enorme relevancia, el juicio al fiscal general. Este no ha sido emitido en directo, por decisión de la propia Sala del Tribunal Supremo, consciente del impacto que tiene la imagen en tiempo real. No hubiera sido igual ver a Miguel Ángel Rodríguez, jefe de gabinete de Díaz Ayuso diciendo que no tenía pruebas del bulo lanzado, que es periodista y no notario. O las declaraciones de José Precedo, periodista de elDiario.es, diciendo que tiene un dilema moral porque sabe quién es la fuente, que no es el fiscal general que está siendo juzgado por ello, pero que no puede decirlo en virtud del secreto profesional. Y hemos visto y oído, después, al Presidente del Tribunal, tomarse esa apreciación como una amenaza.
Pero el impacto hubiera sido mucho mayor con una emisión en directo. Y puede que las declaraciones de unos y otros, distintas. La importancia del directo.