El agua y la prevención ante desastres, principales preocupaciones ciudadanas para el pacto de estado climático

El agua y la prevención ante desastres, principales preocupaciones ciudadanas para el pacto de estado climático

Las mayoría de las 3.800 propuestas remitidas para el borrador que presenta el Gobierno este miércoles se centran en la «resiliencia hídrica», la «aceleración de la transicion ecológica» y la «cultura de la prevención»

España lleva años de retraso en prepararse para golpes como la DANA pese a saber hace décadas que no hay otro remedio

Este miércoles, el Gobierno presenta su borrador de pacto de estado contra la emergencia climática. El texto, anunciado por el presidente Pedro Sánchez en agosto pasado durante la ola de incendios forestales que dejaron más de 300.000 hectáreas de monte arrasado, debería sentar las bases para hacer frente a la realidad acelerada que supone los impactos del cambio climático en España.

Durante el proceso de elaboración de este pacto, la participación ciudadana ha reflejado mediante sus propuestas cuáles son las principales preocupaciones relacionadas con las consecuencias del calentamiento global del planeta. En el caso español, a la luz de los datos, parece que el temor está en el impacto sobre el agua, en cómo acelerar la transición ecológica y reforzar la cultura de la prevención.

En concreto, de las 3.800 propuestas llegadas al Ejecutivo, más de 500 se refieren a la “resiliencia hídrica”; más de 440 a cómo aumentar el ritmo para esa transición ecológica y más de 400 sobre la cultura de la prevención.

Otros campos de interés han sido “el calor”, el ámbito forestal, el mundo rural o los medios para afrontar la emergencia, según los datos del ministerio de Transición Ecológica.

La mayor parte de las aportaciones procede de la comunidad científica: la Oficina Nacional de Asesoramiento Científico (ONAC) he remitdio 202 recomendaciones y propuestas, explican en el ministerio.

Temor a las sequías, los fuegos y las danas

Los problemas con el agua son impacto cíclico y severo que el cambio climático empeora en España. La reducción de los recursos hídricos, el consumo intensivo y el incremento en frecuencia y severidad de las sequías está entre los primeros daños que la emergencia climática causa en España.

De hecho, la última gran sequía registrada en 2022-2023 fue uno de los diez desastres climáticos más costosos de aquel año. Los cálculos apuntaron a un perjuicio superior a los 2.400 millones de euros.

Si se mira a la “cultura de la prevención”, entra de lleno dos de los eventos relacionados con la alteración del clima más severos experimentados en los últimos años: los incendios forestales y las lluvias torrenciales. España ha acumulado un retraso notable en adaptarse a estos golpes.


Un grupo de vecinos limpia su calle arrasada por la DANA en Paiporta, Valencia

Los fuegos de este 2025 han dejado claro las lagunas en la prevención de un fenómeno relacionado con la meteorología provocada por el cambio climático: olas de calor intensas y sequedad ambiental. Por otro lado, las lluvias torrenciales se han multiplicado debido al cambio climático. La dana de octubre de 2024 que dejó más de 200 muertos en la Comunitat Valenciana y Albacete fue prueba de ello.

Tanto los incendios de este verano como aquella tormenta mortífera fueron más probables y más intensas debido a la emergencia climática, según los estudios científicos de atribución.

El pacto contra la emergencia climática tiene al Partido Popular y a Vox en contra. Un nuevo eje negacionista. La vicepresidenta de Transición Ecológica, Sara Aagesen, escribió a los 14 presidentes autonómicos del PP en octubre pasado tras llamar estos “propaganda” al proyecto. Aagesen les contestó que sería “injusto” detener el proceso en el que, finalmente, han participado más de un millar de ciudadanos individuales y 172 participantes colectivos.