El Gobierno estudia elevar a 600 euros la deducción en el IRPF para los perceptores del nuevo SMI
En Hacienda plantean ampliar la actual de los 340 euros anuales hasta el entorno de los 600, para asumir el coste fiscal del aumento del salario mínimo y garantizar que los trabajadores lo perciben íntegro
El Gobierno cierra filas con el informe de expertos de Trabajo sobre el salario mínimo para subirlo entre el 3,1% y el 4,7%
El Gobierno estudia elevar a 600 euros la deducción del salario mínimo interprofesional (SMI) de cara a 2026, de tal manera que el Estado asuma el coste fiscal de la subida planteada para el año próximo y no recaiga únicamente solamente sobre los empleadores.
Según ha adelantado ‘El País’ y han confirmado fuentes conocedoras a este periódico, encima de la mesa está actualizar la deducción que se implantó para el SMI de este ejercicio (1.184 euros al mes, o 16.576 euros al año), que es de 340 euros anuales a presentar en la Declaración de la Renta de 2025, a liquidar en la primavera del próximo año.
El Ministerio de Trabajo presentó el pasado viernes el informe de la Comisión de personas expertas del SMI, que propusieron una subida de entre el 3,1% y el 4,7% (hasta 1.221 euros brutos o 1.240 euros mensuales) de cara a 2026 para cumplir con el objetivo de que el SMI alcanza el 60% del salario medio neto y que se mantiene su poder adquisitivo. El primer escenario sería sin tributación, en tanto que en el segundo los expertos ya contemplan que el salario mínimo estaría gravado en el IRPF. La actualización de la deducción a las cuantías planteadas este año elevarían la cifra hasta el entorno de los 600 euros.
Tradicionalmente el Gobierno había actualizado los mínimos exentos del IRPF con la cuantía del SMI, pero este año el Ministerio de Hacienda decidió que el coste fiscal de esta medida era demasiado elevado para las arcas públicas. Actualizar el mínimo exento en el impuesto no afecta únicamente a los perceptores del SMI, sino que se traslada a toda la distribución, incluidas las rentas más altas que cotizan en tramos más elevados.
Trabajo y Hacienda evitan el conflicto
Tras un agrio debate entre los dos socios del Gobierno, Hacienda planteó la creación de una deducción específica para los perceptores del SMI a aplicar en la Declaración de la Renta, de tal manera que su coste fiscal sea menor y se aplique únicamente a los casos en los que la retención habría sido máxima (fundamentalmente, personas solteras y sin hijos de hasta 35 años). De no aplicarse la deducción actualizada, en la parte baja de la horquilla Hacienda absorbería prácticamente el 100% de la mejora salarial, mientras que se situaría en torno al 80% en la más elevada.
El Ejecutivo busca evitar a toda costa la bronca entre socios a principios de año. En su encargo a los expertos, la vicepresidenta segunda y ministra de Trabajo, Yolanda Díaz, les pidió dos cifras para elevar el SMI, con y sin tributación en el IRPF, de tal forma que fuese la decisión de Hacienda la que decantase a un lado o a otro la balanza.
Y Hacienda, que se guardó hasta el último momento la decisión de no actualizar el mínimo exento del IRPF, también ha abierto la puerta desde el primer momento a ampliar la deducción actual.
El objetivo de evitar a toda costa la confrontación se trasladó también al informe de Expertos del SMI. Los designados por Economía y Hacienda presentaron un voto particular a la metodología que se empleó para el cálculo de la cifra para este año, aunque la cifra se quedó en eso, en la metodología, y no se incluyó en el documento final. El Gobierno cerró filas con los expertos.