Oliver Laxe, tras su premio en Cannes: “He hecho ‘Sirat’ para llegar a un público joven que no tiene referentes”

Oliver Laxe, tras su premio en Cannes: “He hecho ‘Sirat’ para llegar a un público joven que no tiene referentes”

El director español habla pocos minutos después de ganar el Premio del Jurado en el festival con un filme ambientado en el mundo de las raves

Todo sobre el Festival de Cannes – El español Oliver Laxe gana el Premio del Jurado de Cannes en una edición que entrega la Palma de Oro a Jafar Panahi

Oliver Laxe llegaba sonriente a la zona de prensa del Palais des Festivals, donde se acababa de celebrar la ceremonia de clausura del Festival de Cannes. Bromeaba con que su reconocimiento parecía un jabón. Lo decía por su forma, pero también porque como los sueños, parecía algo que podía desvanecerse. Se refería al Premio del Jurado que acababa de ganar con Sirat, su nueva película que desde que se presentó el pasado jueves sacudió el certamen. En los corrillos de Cannes se hablaba de Laxe, y su nombre apareció en el palmarés con un galardón que no se ganaba desde 1992, cuando Víctor Erice lo lograra con El sol del membrillo. Desde entonces un premio a la mejor dirección y otro al mejor guion para Pedro Almodóvar era el botín del cine español.

Apenas acaba de pasar media hora desde que la actriz Alba Rohrwacher anunciara su nombre, y en un encuentro con la prensa española en el festival reconocía que ese Premio del Jurado para él “equivale a más libertad”. “Legitima el trabajo que estoy haciendo con mi equipo y nos invita a seguir en la misma línea. Hemos entendido el mensaje. Lo que quiere la gente es libertad, lo que saborea la cinefilia internacional es que haya cineastas que siguen tomando riesgos”, valoraba.

Con sus anteriores películas había ganado premios en todas las secciones paralelas, y su primera presencia en la Sección Oficial le gradúa con honores en un festival que cree que es “un lugar de resistencia del cine con alma”. “Aquí hay un cine un poco más vigoroso. Lo hay más frágil, pero todas las películas tienen fortaleza y son miradas sólidas y profundas que nos recuerdan que hay que seguir teniendo esperanza en que las cosas se siguen haciendo bien. Hay una tradición aquí muy fuerte y muy sana de cine. He pensado mucho en los maestros, en tantos cineastas que han pasado por aquí y me siento muy honrado y muy agradecido”, añadía.


Oliver Laxe en la alfombra roja de la gala de Clausura de Cannes

En la rueda de prensa del jurado, Jeremy Strong decía que han premiado películas que no solo eran “artísticamente importantes”, sino también “trascendentes”. A Laxe esa afirmación le hace pensar en cuando era un adolescente, “sin muchos referentes, sobre todo espirituales”. Un adolescente que encuentra en el arte “ese juguetito con el que calentar las manos”. “Creo que los espectadores de lo que más disfrutamos es de la libertad del autor, de que tenga miedo. Eso es lo que nos alivia y nos calma. El arte, en cualquiera de sus formas, a mí me ayudó mucho a tener menos miedo, a conocerme mejor y a ser una persona más emancipada”, subraya.

Su relación con las imágenes es la misma que cuando en aquel instituto descubrió la asignatura de imagen y sonido: “Es la misma relación. Con la sensorialidad de las imágenes, con su lado más sensual. Eso habla mucho del cine radical, que es una palabra que utilizo mucho y me gusta recordar la etimología de la palabra radical, que es raíz. La clave, para mí, ha sido siempre tirarme al abismo. Yo creo que nunca he cogido el camino fácil. Cuando me fui a vivir a Marruecos ya asumí que iba a ser un francotirador que hace sus películas con una cámara de 16 revelando en un cuarto de baño. Siempre he cogido un camino que fuera esencial, que me ayudara a conocerme”.

Un premio como este suele aportar tranquilidad. Ganar en Cannes ayuda a que llegue el dinero para la siguiente, y eso suele significar más ambición y nuevos horizontes. Pero Laxe nada a contracorriente, y en vez de pensar en lo que viene, en ese más difícil todavía, se califica así mismo como “un artesano que lo que necesita es tiempo, y el tiempo es fácil de conseguir”. “Hago una película cada cinco años. La siguiente a lo mejor tardo ocho. No lo sé. Lo que no quiero es engañarme. Así que ya veremos”, ataja con cautela.

Hemos entendido el mensaje. Lo que quiere la gente es libertad, lo que saborea la cinefilia internacional es que haya cineasta que siguen tomando riesgos

Oliver Laxe
Cineasta

Quien ha ganado la Palma de Oro ha sido Jafar Panahi, y Laxe confiesa que se quedó a dos minutos de poder entrar a verla en Cannes, pero que todos los miembros de su equipo que sí la vieron quedaron “profundamente conmovidos con la película”. “Qué bonito perder con gente así… es que además yo soy un amante de Irán. He viajado mucho allí. Irán es uno de los referentes cinematográficos del mundo. Tienen 7000 años de civilización y es un país de una excelencia extrema”.

Apenas un día antes de saber el palmarés, la distribuidora Neon, responsable del éxito de Anora el año pasado y que tras la victoria de Panahi suma seis Palmas de Oro consecutivas, compraba el filme de Laxe para su distribución en EEUU. Una noticia que asegura un estreno allí y que puede facilitar una hipotética carrera por el Oscar. Para Laxe en estas dos semanas ha habido dos momentos clave. Uno el ver que la gente hablaba por la calle de su película, que había “una conexión muy profunda con el espectador”.

El otro fue ver el interés de Neon, que hicieron “una oferta increíble” y que “han mostrado una confianza en la película muy marcada”. Los Oscar es un sitio donde nunca se ha proyectado, pero tampoco creyó que podía estar en Cannes. Por eso, más que los premios, para él lo importante es que esta alianza con Neon le ayude a su meta de alcanzar a más públicos: “Creo que la película puede conectar con muchos públicos y sobre todo con público joven. Yo he diseñado esta película para llegar a ese público joven que no tiene referentes, que hace tiempo que ya no va al cine, que es probable que no la entiendan, pero que ojalá las imágenes hagan un efecto en ellos y les haga volver al cine. Eso me hace mucha ilusión”.