Familiares de víctimas del franquismo responden a Aguirre tras su defensa de la dictadura frente a la II República: “Es muy preocupante”

Familiares de víctimas del franquismo responden a Aguirre tras su defensa de la dictadura frente a la II República: “Es muy preocupante”

El presidente de la Asociación para la Recuperación de la Memoria Histórica lamenta la «impunidad» con la que se puede alabar la dictadura: «Debería tener un coste político y judicial»

Esperanza Aguirre afirma que “a la larga” la dictadura “fue mejor” que la Segunda República

La expresidenta madrileña Esperanza Aguirre considera que el franquismo –con más de 140.000 víctimas entre la Guerra Civil y la dictadura– no estuvo tan mal. Es más, que la dictadura franquista “fue mejor” que la Segunda República. “No creo que [la dictadura] fuera mejor [que la República] en los primeros años, pero a la larga sí fue mejor”, afirma Aguirre en una entrevista publicada este jueves en El País, en la que también dice que Franco “permitió que surgiera la clase media” e hizo que España creciera “de una manera exponencial”.

La Asociación para la Recuperación de la Memoria Histórica (ARMH) no ha tardado en responder ante el agravio. “A la larga no se puede esconder lo que una es durante todo el tiempo. En otros países estas declaraciones, habiendo miles de desaparecidos de la dictadura en las cunetas, tendrían graves consecuencias políticas y justas consecuencias penales”, escribe en Twitter una de las principales organizaciones por la memoria en España.

Emilio Silva, presidente de la ARMH y nieto de un republicano desaparecido por la represión franquista, confiesa su estupor al leer las declaraciones de Aguirre. En conversación con elDiario.es, Silva reconoce que no acaba de sorprenderle este discurso de la exlíder del PP, pero sí le preocupa que se atreva a pregonarlo así. “Seguramente [Aguirre] siempre ha pensado esto y lo ha callado; lo más preocupante es que estamos en un tiempo en el que la gente ha dejado de callarse estos discursos. Si lees el contexto en el que lo dice, igual es que se está oliendo que a la democracia le puede pasar algo, o quiere que le pase algo. Eso me parece muy grave”, afirma.

Una “desinhibición colectiva” para “alabar el franquismo”

Silva alerta de una “desinhibición colectiva” que se está produciendo en los últimos años, por la que se tiende a tergiversar la historia reciente y se llega a “idealizar el franquismo”, incluso desde sectores muy jóvenes de la población. El sociólogo y periodista entiende que las declaraciones de Aguirre se enmarcan en esa corriente, aunque también lo ve como una forma de posicionarse y llamar a filas ante el próximo congreso nacional del PP, que se celebra en julio.

Más allá de buscarle una explicación, a Silva le duele la “impunidad” con la que personajes públicos pueden hacer este tipo de afirmaciones sin consecuencia alguna. Esperanza Aguirre “está alabando el franquismo, que todavía tiene a miles de sus víctimas desaparecidas; pero si alguien dijera públicamente ‘visto de lejos, cuando ETA asesinaba las cosas estaban mejor’, acabaría delante de un juez un rato después”, sostiene.

No es la primera vez que las familias de desaparecidos por el franquismo han tenido que soportar ofensas de parte de representantes del PP –ahí están Mayor Oreja hablando de la dictadura como un momento de “extraordinaria placidez” o Rafael Hernando diciendo que “algunos se han acordado de su padre cuando había subvenciones para encontrarlo”– y, sin embargo, se niegan a normalizarlo. “He mandado el artículo a un montón de familiares de desaparecidos y no puedo leer las cosas que me han contestado”, cuenta el presidente y fundador de ARMH.

Emilio Silva es muy crítico con la falta de “contundencia” de la Ley de Memoria Democrática, a la que achaca no proteger bien la memoria de las víctimas del franquismo, como sí se hace en otros países que han sufrido la represión o como se hace con las víctimas del terrorismo, sostiene. “Si en la CDU alemana [equiparable al PP español] alguien dijera esto del nazismo, tendría consecuencias con la justicia y en su partido inmediatamente”, afirma Silva. No en vano, en Alemania todos los partidos mantienen un cordón sanitario frente al ultraderechista AfD.

En España, en cambio, “ni los legisladores ni el Poder Judicial han querido que este tipo de declaraciones tengan consecuencias”, apunta Silva. “Si la ley fuera contundente, esto tendría un coste político y judicial. Pero no es el caso”, lamenta.