Miguel Urbán denuncia en la Audiencia Nacional el montaje policial del falso tráfico de cocaína

Miguel Urbán denuncia en la Audiencia Nacional el montaje policial del falso tráfico de cocaína

El fundador de Podemos solicita que se abra una pieza separada en la causa por la guerra sucia del PP contra el partido por delitos de calumnias, intromisión en la intimidad o falsificación de documentos

El invento bajo secreto de la Policía contra Podemos: Miguel Urbán y 40 kilos de coca en el pub Nueva Visión de Malasaña

El fundador de Podemos Miguel Urbán ha denunciado en la Audiencia Nacional el montaje policial que sufrió durante el primer semestre de 2016 y que le vinculaba falsamente con la venta de 40 kilos de cocaína para financiar al partido político al que entonces pertenecía y del que era europarlamentario. Urbán se dirige al juzgado de Santiago Pedraz, que investiga la guerra sucia contra Podemos, y pide que se abra una pieza separada para indagar en las maniobras policiales en su contra.

En un escrito al juzgado, la representación legal de Urban señala la posible comisión de los delitos de caluminas, intromisión ilegítima en la intimidad y falsificación de documentos. El exeurodiputado menciona a dos de los comisarios que protagonizaron el montaje en su contra. Se trata del entonces director del Centro de Inteligencia contra el Terrorismo y el Crimen Organización (CITCO), José Luis Olivera, y quien dirigía la Unidad contra la Delincuencia Económica y Fiscal (UDEF), José Manuel García Catalán.

Olivera se sentará en el banquillo por haber participado presuntamente en otra de las maniobras de la brigada política, el espionaje a Luis Bárcenas con fondos reservados, mientras que García Catalán ha declarado como testigo en la causa contra Podemos que se sigue en el Juzgado Central de Instrucción número 5 de la Audiencia Nacional.

La Fiscalía Antidroga abrió una investigación a partir de un informe firmado por el comisario Olivera en el que un confidente aseguraba haber presenciado cómo Urban, siendo europarlamentario, vendió 40 kilos de cocaína procedente de Venezuela a un tercero, con la intermediación del dueño de un pub de Malasaña.

La cocaína, añadía el relato del confidente al que daba crédito el comisario, incluía que el destino del dinero era la financiación ilegal de Podemos. “Los policías –dice la denuncia–, sin ninguna autorización judicial, actuando de forma ilegal y vulnerando los derechos del señor Urban rebuscan en la vida económica del militante de Anticapitalistas”.

A partir del grotesco relato, la Policía lograba amparo para indagar en las cuentas de Urban y, según ha acreditado la Audiencia Nacional, rebuscar en las bases de datos policiales cuestiones relacionadas con Pablo Iglesias, entonces líder del partido.

Podemos ha intentado incorporar las diligencias de la Fiscalía Antidroga a la causa que se sigue en el juzgado de Pedraz, pero el juez lo ha rechazado siguiendo el criterio del fiscal del caso. Pedraz ha accedido a tomar declaración como investigado al policía que buscó en las bases de datos a Pablo Iglesias con la excusa del bulo de la droga.