
Barcelona rinde homenaje a las víctimas del 17-A en el octavo aniversario del atentado
El acto, breve y emotivo, ha consistido en un minuto de silencio y una ofrenda floral, acompañado por las ya acostumbradas protestas
Los Mossos y tres universidades identifican los “factores de riesgo” que radicalizaron a los terroristas del 17-A
Hace ocho años, una furgoneta atravesaba a toda velocidad la Rambla de Barcelona, causando 368 heridos y 16 muertos. Este domingo, y como todos los 17 de agosto, supervivientes, familiares de las víctimas, vecinos y representantes de las instituciones se han reunido en ese lugar emblemático de Barcelona. Concretamente, en el mosaico de Joan Miró, el mismo sitio en el que se paró la furgoneta después del atropello masivo.
El acto de este año ha sido breve y conciso: un minuto de silencio y la ya tradicional ofrenda floral acompañada de El cant dels ocells. Primero los familiares y luego políticos. Y, como cada año, también ha habido quien ha aprovechado la cita para protestar contra el Estado y la Generalitat por su gestión de los hechos.
Pero este año, las pancartas y los silbidos se han dejado oír menos que otras veces ya que las víctimas confían en que pronto se cumplirá una reivindicación histórica y se abrirá una oficina que atienda a las víctimas. Catalunya ya disponía de esta herramienta, pero se cerró por los recortes de 2010 y no llegó a asistir a las víctimas del 17-A, quienes siempre se han quejado del poco apoyo con el que han contado a la hora de buscar ayuda psicológica.
Tampoco han faltado los manifestantes que han levantado pancartas con lemas como “Estado asesino”. Eran miembros de la plataforma ’17A exigim responsabilitats’. Las incógnitas sobre la preparación del atentado y las dudas sobre sus responsables se han incrementado de un año a esta parte debido a las diversas comparecencias en la comisión de investigación del Congreso sobre los atentados, una de las condiciones que impusieron Junts y ERC a Pedro Sánchez a cambio de la investidura.
A la ofrenda floral han acudido el president de la Generalitat, Salvador Illa; el alcalde de Barcelona, Jaume Collboni; el president del Parlament, Josep Rull; el delegado del Gobierno, Carlos Prieto; la consellera de Interior, Núria Parlon, diputados del Parlament y diversos concejales del Ayuntamiento.