Los traslados obligatorios de menores migrantes empezarán desde Ceuta, gobernada por el PP

Los traslados obligatorios de menores migrantes empezarán desde Ceuta, gobernada por el PP

La maquinaria está en marcha y Ceuta, gobernada por el PP, enviará la semana que viene a niños y adolescentes migrantes a otras comunidades, en aplicación del sistema de reparto obligatorio aprobado por el Gobierno en marzo tras más de un año de tensas negociaciones

Andalucía, Madrid y Comunitat Valenciana tendrán que acoger a casi la mitad de los menores migrantes de Canarias

Son muchos los gobiernos del Partido Popular que han intentado evitarlo, pero las primeras reubicaciones de menores extranjeros no acompañados son ya “inminentes”. La maquinaria está en marcha y Ceuta, gobernada por el PP, será la primera autonomía en enviar a niños y adolescentes migrantes a otras comunidades, en aplicación del sistema de reparto obligatorio aprobado por el Gobierno en marzo tras más de un año de tensas negociaciones. Según marcan los plazos de la normativa, los traslados empezarán la semana que viene.

Las llegadas de menores a las costas ceutíes durante las últimas semanas y la rapidez de la tramitación de expedientes por parte del área de menores de la ciudad explican que Ceuta vaya a ser la autonomía que estrenará el nuevo sistema de reubicación. La norma obliga a ejecutar el traslado de los menores llegados tras la declaración de contingencia migratoria durante los siguientes 15 días naturales desde su entrada a España. La declaración de emergencia le fue reconocida a Ceuta el pasado 29 de agosto y, tras esa fecha, el contador empezó a correr desde el registro de los primeros adolescentes que entraron a nado a la ciudad. Desde entonces y hasta el pasado miércoles, ya lo han hecho 43 menores, según las cifras que maneja el Gobierno local.

El nuevo sistema de reparto divide el procedimiento en dos vías. Por un lado, una fórmula “exprés”, destinada a quienes llegan después de la declaración de emergencia. Estos envíos son más rápidos, con el objetivo de evitar aumentar la saturación ya existente en los centros de acogida. La segunda vía está dirigida a los chavales que ya estaban en estas autonomías antes de pedir oficialmente la contingencia. Para ellos, aunque los trámites son similares, existe un mayor plazo (cuatro meses) para ejecutar la reubicación desde la solicitud inicial, aunque en ningún caso se podrán realizar más allá del próximo 18 de marzo, tal y como marca la legislación. 

Debido a ese plazo más corto para los recién llegados, los últimos chavales en llegar a Ceuta, Melilla y Canarias serán los primeros en salir. En concreto, el sistema de reparto lo estrenarán aquellos que entraron en Ceuta entre el 29 y el 31 de agosto. Tras su registro el 1 de septiembre, el Gobierno local y la Subdelegación del Gobierno en la ciudad activaron el procedimiento de traslado, que deberá materializarse en un máximo de 15 días, tal y como establece el protocolo. En el transcurso de esas dos semanas, la Subdelegación ha solicitado a Ceuta un informe individualizado de cada menor, para cuya realización es imprescindible una entrevista personalizada para tener en cuenta las circunstancias concretas de cada caso en la elección del destino. En el proceso, el menor puede hacer alegaciones o rechazar el traslado y la decisión final no puede tomarse sin el visto bueno de la Fiscalía.

Para cumplir con los plazos marcados por la legislación, estos primeros menores deben ser trasladados, como tarde, el próximo martes 16 de septiembre. El Ministerio de Infancia prefiere no desvelar la fecha concreta ni los destinos de las reubicaciones de los chavales para proteger a los niños y adolescentes, especialmente en un momento de aumento del discurso del odio y de los ataques xenófobos. Fuentes ligadas al proceso recalcan que los primeros traslados son “inmediatos”. 

Desde la declaración de la contingencia migratoria hasta el pasado miércoles, han llegado a Ceuta 49 menores, aunque el proceso se encuentra más avanzado con 19, a los que la Administración ceutí ya ha realizado las correspondientes entrevistas. “Nos han mandado instrucciones el ministerio, pero son muy parecidas a las que nosotros hacemos habitualmente”, explica Antonia Palomo, responsable de menores en la ciudad autónoma, quien trabaja a destajo para sacar adelante los expedientes de cada menor en los plazos marcados. 

El colapso de la red de acogida ceutí les empuja a gestionar de manera rápida no solo los expedientes de los menores que acaban de llegar, sino también los casos de quienes ya estaban acogidos en la ciudad antes de la declaración de contingencia. Según los datos del Área de menores, el Gobierno local ya ha enviado los informes de alrededor de 90 chavales más. “Todo el mundo está coordinado para sacar adelante estos traslados. Delegación del Gobierno, Extranjería, Policía Nacional, el Ministerio Fiscal… Estamos trabajando en un equipo cohesionado para conseguir el objetivo de cumplir la legislación vigente y conseguir que se cumpla el interés superior del menor”, indica Palomo. 

En los últimos meses, el goteo de llegadas de chavales a Ceuta vuelve a ser constante. Especialmente durante la noche, decenas de personas jóvenes se echan al mar desde las costas marroquíes con la intención de rodear el espigón fronterizo del Tarajal y alcanzar alguna de las playas ceutíes. La ciudad fronteriza acoge a más de 590 menores migrantes, cuando tiene una capacidad ordinaria -la que debería ser la ideal en base a su población- de 27 plazas. 

Aunque el foco ha estado siempre en Canarias, que alberga a más de 4.000 menores, las características de la pequeña ciudad fronteriza, de apenas 84.000 habitantes, explican la saturación de sus escasos recursos de acogida. “Estamos gestionando su atención con mucha dificultad. Vivimos una situación de alarma total. Es insostenible que podamos sostener este nivel de ocupación en los centros para atender a estos niños como necesitan”, indica la jefa de menores de la ciudad. 

El primer menor llegado a Canarias

En Canarias, la cuenta atrás para comenzar con los traslados de menores empezó el pasado miércoles. Ese día, un atunero encalló en la costa del pueblo de Órzola, en el norte de Lanzarote. Entre los cinco migrantes que viajaban a bordo, uno declaró ser menor de edad. Ese adolescente marroquí será el primero en salir de las islas, por lo que será reubicado en otra comunidad en el plazo máximo de 15 días, siempre que no muestre su rechazo a abandonar el Archipiélago, según ha confirmado la Consejería de Bienestar Social a elDiario.es.

Tras el registro, como marca el protocolo, el Gobierno canario recibió la solicitud formal del expediente por parte de la Subdelegación. Para cumplir dicho trámite, se ha llevado a cabo una entrevista, con presencia de un mediador, para que el chico pudiese explicar sus circunstancias de origen, que serán valoradas a la hora de decidir el lugar donde será enviado. “La entrevista busca que el menor manifieste todo aquello que quiera decir: por qué ha venido, si tiene familia o no, para poderlo tenerlo en cuenta a la hora de decidir a qué comunidad va a ser trasladado para su acogimiento definitivo una vez sea culminado todo el proceso”, explica Sandra Rodríguez, directora general de infancia en Canarias. 

Además de este primer menor llegado tras la declaración de contingencia, que será tramitado por la vía exprés, la Consejería de Canarias ha comenzado la tramitación de unos 80 casos de adolescentes que ya se encontraba en el Archipiélago, según los datos trasladados por el Ejecutivo insular. Ellos deberán ser reubicados en un plazo de cuatro meses. 

En las últimas dos semanas, también han llegado menores a Melilla (también gobernada por el PP), la tercera de las autonomías a las que fue concedida la declaración de contingencia por parte del Gobierno central, por lo que se acogerá al sistema de reparto obligatorio. elDiario.es ha preguntado al Gobierno local por el número de expedientes tramitados, pero por el momento no ha recibido respuesta. Fuentes del Ministerio de Infancia confirman que también se han empezado a tramitar los primeros casos, de unos seis adolescentes, desde suelo melillense.

Parte del equipo técnico del Ministerio ha mantenido diversas reuniones durante las últimas semanas en los distintos territorios desde donde partirán los menores trasladados para “coordinar a todas las partes implicadas”. El Ministerio ha acordado establecer un sistema de seguimiento semanal de los casos, según afirmó la Delegada del Gobierno en Melilla. 

En todos los expedientes tramitados, la Subdelegación del Gobierno de cada territorio realiza en un primer momento una propuesta de destino para cada menor, seleccionada en un primer momento de manera automática por una herramienta creado por el Ministerio de Infancia a partir del número de menores que corresponde recibir a cada comunidad, aunque esa propuesta puede cambiar a lo largo de la instrucción del caso, dependiendo de las circunstancias individuales de cada menor. Así, las primeras reubicaciones pretenden que se distribuyan de manera equilibrada por todo el territorio. Según el Ministerio, aunque se empezará por las comunidades a las que corresponda la acogida de más chavales – Andalucía, Comunidad Valenciana y la Comunidad de Madrid-, la idea no es enviar de golpe a todos los chavales que les corresponde a cada autonomía, sino que se pretende hacer de manera escalonada.

Ante el rechazo manifestado por la mayoría de gobiernos autonómicos del PP contra el sistema de reparto obligatorio, la normativa ofrece como posibilidad de solicitar el acompañamiento policial durante el trayecto a las comunidades autónomas de origen, encargadas de gestionar el traslado de cada menor a su lugar de destino. Pese a las constantes declaraciones contrarias a al sistema que busca apoyar a los territorios declarados en emergencia humanitaria (paradójicamente todos gobernados o cogobernados por el PP), el Ministerio de Infancia confía en que todos los gobiernos cumpla la normativa y acojan a los menores que correspondan. “Más allá de la performance política, la realidad es que muchas de ellas han asumido que tienen que acoger a los menores”, concluyen fuentes del departamento dirigido por Sira Rego.