«Todos somos Jimmy Kimmel»: los presentadores de ‘late shows’ se vuelcan con el cómico y claman contra la “censura” de Trump

«Todos somos Jimmy Kimmel»: los presentadores de ‘late shows’ se vuelcan con el cómico y claman contra la “censura” de Trump

Tras el anuncio repentino de la cancelación del programa de Kimmel por un comentario sobre el presunto asesino de Charlie Kirk, cómicos estadounidenses apoyan a su compañero y llaman a «defender la libertad de expresión»

Trump amenaza la libertad de expresión en EEUU con su acoso a las voces críticas

“¿Qué le pasa a Estados Unidos?”. Con esa pregunta (retórica) resumía la mítica actriz Jean Smart su indignación tras el despido fulminante del cómico Jimmy Kimmel por hacer un comentario sobre el presunto asesino de Charlie Kirk. “Lo que dijo Jimmy era LIBERTAD de expresión, no discurso de odio. Parece que la gente quiere proteger la libertad de expresión solo cuando cumple sus propósitos. (…) ¿Qué le pasa a nuestro país?”, recalcó la protagonista de Hacks en Instagram, asegurando estar “horrorizada” por la decisión de la cadena ABC de retirar de su parrilla de forma indefinida el show de Kimmel.

A medida que pasaron las horas tras conocerse la polémica suspensión del programa –que Donald Trump celebró en sus redes sociales y que ya había pedido con anterioridad–, más y más compañeros de Kimmel y del gremio de la actuación se sumaron a las críticas, tanto desde redes sociales como en sus propios programas o incluso en las calles, donde en las últimas horas ya se han producido al menos dos manifestaciones en defensa de la libertad de expresión.

“Estamos hablando de censura en los medios, es un precedente peligroso porque lo que se está diciendo es que un comediante no puede hacer una broma sobre el presidente”, dijo a EFE Aimee Cink, una de las manifestantes frente al estudio donde se graba el programa de Kimmel, en Hollywood, que alertaba en una pancarta de “señales peligrosas de fascismo”.  La protesta en Hollywood fue la segunda de este jueves en California por el mismo motivo. Por la mañana, cientos de trabajadores del entretenimiento se manifestaron frente a las oficinas de Disney, propietaria de ABC, por la suspensión del programa.

Un programa “completamente renovado y aprobado por el gobierno”

Ya por la noche, los presentadores de programas que compartían franja horaria con Kimmel se volcaron de lleno a apoyarlo y a criticar a Trump, con su particular retranca. Jon Stewart presentó, de hecho, un programa especial conducido por él mismo –pese a que normalmente solo presenta los lunes– en el que se dedicó durante más de 20 minutos a cargar contra la falta de libertad de expresión desde la comedia, aludiendo a Trump como “nuestro padre” o “nuestro querido líder”. 

Definió su show como un programa “completamente renovado y aprobado por el gobierno” y lo presentó desde un plató repleto de dorados, emulando el Despacho Oval de la Casa Blanca, que Trump ha cargado de ornamentos y decoración fastuosa desde el inicio de su segundo mandato el pasado enero.

“Algunos detractores podrían argumentar que las preocupaciones de esta Administración sobre la libertad de expresión no son más que una maniobra cínica, un engaño endeble, una cortina de humo para ocultar una concentración de poder sin precedentes y una intimidación unitaria; carente de principios y fríamente opuesta a cualquier experimento de gobernanza en una república constitucional”, apuntó Stewart. “Algunas personas dirían eso. Yo no, claro… A mí me parece estupendo”, añadió con ironía.

“Es un honor y un privilegio llamar amigo a Jimmy Kimmel”, dijo por su parte el presentador Seth Meyers en su programa. “Este es un momento importante para nuestra democracia, y debemos ponernos en pie por la libertad de expresión. Hay un motivo por el que la libre expresión está en la primera enmienda, porque va antes que todos los demás”, señaló.

“Todos somos Jimmy Kimmel”

“Esta noche todos somos Jimmy Kimmel”, avanzó el mítico Stephen Colbert en la apertura de su The Late Show, donde denunció que lo ocurrido es una “censura flagrante”. “Con un autócrata no puedes ceder ni una pulgada. Si ABC piensa que esto va a satisfacer al régimen son lamentablemente ingenuos”, recalcó el presentador, cuyo programa dejará de emitirse en mayo de 2026 tras una decisión que la cadena CBS justificó por razones puramente financieras y que el presidente estadounidense celebró.

Jimmy Fallon, otro de los grandes de la comedia en horario de noche en EEUU, dijo: “Sinceramente, no sé qué está pasando, nadie lo sabe. Pero conozco a Jimmy Kimmel, y es un tipo decente, divertido y cariñoso. Espero que vuelva”.

Ya fuera de los late shows, el productor y guionista de la serie Lost –entre otras–, Damon Lindelof, se dijo “impactado, triste y furioso” por el despido de Kimmel y aseguró que no trabajará con Disney hasta que Kimmel vuelva a su programa. Lindelof describe al cómico como una persona “buena” y “generosa” que “ama el país”, y pide a la gente “diferenciar entre discurso de odio y una broma”.  

El actor Pedro Pascal publicó también en Instagram una foto con Kimmel en la que le manda su apoyo y anima a defender la libertad de expresión y la democracia. 

Entre los compañeros de Kimmel en la franja de los late night, también Michael Kosta, presentador de The Daily Show, colgó en sus historias de Instagram que “se trata de un momento grave en la historia de Estados Unidos”, ante el que las televisiones “deben pelear”.

Kirk fue asesinado de un disparo el 10 de septiembre en un acto al aire libre en una universidad de Utah. El acusado, Tyler Robinson, es un joven blanco de 22 años y Kimmel sugirió en su intervención que era republicano. “La pandilla MAGA [de las siglas Make America Great Again, volvamos a hacer grande a EEUU] está intentando desesperadamente caracterizar a este chico que asesinó a Charlie Kirk como algo distinto a uno de ellos y haciendo todo lo posible para sacarle rédito político”, dijo Kimmel el lunes.

Trump amenaza con quitar permisos de emisión a los canales críticos

Trump, que hasta este jueves estaba de visita oficial en Reino Unido, no se ha mostrado en absoluto ajeno a la polémica. Además de celebrar abiertamente la cancelación de Kimmel, en su viaje de vuelta a EEUU Trump ha amenazado con quitarle los permisos de emisión a los canales que le critiquen, apuntando que aquellos con licencia no están autorizados a ir en su contra.

“Leí en alguna parte que los canales estaban en un 97% en mi contra. Un 97% negativo. Y, sin embargo, gané fácilmente en los siete estados clave (en las presidenciales). Si están un 97% en mi contra, sólo me dan mala publicidad y tienen una licencia, diría que tal vez deberían quitarles el permiso”, dijo a bordo del avión presidencial Air Force One.