
Cierre del Gobierno de EEUU: cómo funciona, cuáles son las consecuencias y cuánto puede durar
La incapacidad de republicanos y demócratas para acordar un presupuesto antes de la fecha límite fijada para este miércoles ha activado un cierre del Gobierno Federal
EEUU cierra su Gobierno por la falta de apoyos de Trump para su plan de gasto
Gran parte del Gobierno federal de EEUU comenzó oficialmente a cerrar el miércoles, después de que el Congreso no lograra alcanzar un acuerdo de presupuesto antes de la fecha límite de medianoche. El cierre tendrá una amplia gama de consecuencias en los servicios gubernamentales y, potencialmente, en la economía estadounidense.
Los republicanos presentaron una medida provisional para mantener abiertas las agencias hasta el 21 de noviembre, pero los demócratas han retirado su apoyo y exigen que el proyecto de ley aborde los recientes recortes a Medicaid y amplíe los subsidios de seguro médico en virtud de la Ley de Cuidado de Salud Asequible, que expira a finales de año. Los líderes republicanos rechazaron sus demandas por considerarlas inviables y se unieron para bloquear la propuesta de financiación a corto plazo de los demócratas.
Con demócratas y republicanos atrincherados y sin previsión de que la Cámara vote esta semana, el Congreso se prepara para una confrontación prolongada, dejando a los trabajadores y agencias federales en el limbo mientras cada bando culpa airadamente al otro.
Y, en una fuerte escalada, la Casa Blanca ha amenazado con despidos masivos permanentes de trabajadores del Gobierno, que se suman a los aproximadamente 300.000 que ya despidió a principios de este año.
¿Qué significa un cierre del gobierno?
Cuando el Congreso no aprueba la legislación de financiación, las agencias federales están obligadas por ley a detener sus operaciones, lo que provoca un cierre. Los empleados clasificados como ‘no exentos’ son suspendidos temporalmente sin sueldo, mientras que el personal ‘exento’, aquellos cuyos trabajos implican proteger la vida y la propiedad, deben seguir trabajando sin sueldo hasta que finalice el cierre.
Hasta que el Congreso actúe, muchos servicios federales se detendrán o se interrumpirán temporalmente, ya que ciertas agencias cesarán todas las funciones no esenciales.
En un Washington polarizado, con las cámaras divididas por un estrecho margen, las amenazas de cierre se han convertido en una característica de las recientes batallas presupuestarias del Congreso. Pero, en la mayoría de los casos, los líderes de los partidos son capaces de llegar a un acuerdo de última hora para evitar una interrupción en la financiación. Esta vez no ha sido así.
¿Cuánto tiempo durará el cierre del Gobierno y cuál ha sido el cierre más largo?
Aún no se sabe cuánto durará. En 2018, durante el primer mandato de Trump, el punto muerto resultó en un cierre de 34 días, el más largo de la era moderna. En aquel momento, aproximadamente 800.000 de los 2,1 millones de empleados del Gobierno federal quedaron suspendidos sin sueldo.
¿Por qué cierra el Gobierno esta vez?
El nuevo año fiscal del Gobierno federal comenzó este miércoles sin que se llegara a un acuerdo sobre un proyecto de ley de financiación a corto plazo.
Los demócratas, excluidos del poder en Washington, tienen poca influencia, pero sus votos son necesarios para superar el filibusterismo en el Senado. Exigen una prórroga de las subvenciones que limitan el coste del seguro médico en virtud de la Ley de Asistencia Asequible y que están a punto de expirar, la revocación de los recortes a Medicaid realizados en la Ley ‘Big Beautiful Bill’ de Trump y el restablecimiento de la financiación a los medios de comunicación públicos que se recortó en el paquete de rescisiones.
Los demócratas del Congreso están bajo presión para que utilicen su influencia para plantar cara a Trump y a su Administración. En marzo, Schumer (el líder de la minoría demócrata en el Senado) prestó los votos demócratas necesarios para aprobar una medida de financiación a corto plazo redactada por los republicanos sin obtener ninguna concesión a cambio, una medida que enfureció a la base del partido.
Los republicanos, que controlan ambas cámaras del Congreso, se niegan a negociar con los demócratas sus demandas en materia de sanidad. En cambio, los líderes republicanos del Senado se han comprometido a seguir obligando a los demócratas a votar una medida provisional que ampliaría los niveles de financiación, en su mayoría a los niveles actuales, hasta el 21 de noviembre. El proyecto de ley fue aprobado por un estrecho margen en la Cámara de Representantes, pero el martes no alcanzó el umbral de 60 votos en el Senado.
Donald Trump recibió a los líderes del Congreso en la Casa Blanca a principios de esta semana, pero la reunión no logró producir ningún avance.
El presidente de EEUU, Donald Trump.
¿Por qué es más grave la amenaza de cierre del Gobierno este año?
En esta ocasión, el impacto sobre los trabajadores federales podría ser aún más grave. En un memorándum publicado la semana pasada, la Oficina de Gestión y Presupuesto (OMB) de la Casa Blanca pidió a las agencias que se prepararan no solo para suspensiones temporales, sino también para despidos permanentes en caso de cierre.
El memorándum ordenaba a las agencias que prepararan avisos de reducción de plantilla para los programas federales cuyas fuentes de financiación se interrumpieran en caso de cierre y que “no son coherentes con las prioridades del presidente”.
La OMB lideró los esfuerzos anteriores de la Administración para reducir la plantilla federal como parte de una campaña más amplia dirigida por el “departamento de eficiencia gubernamental” de Elon Musk.
En un acto celebrado el martes, Trump afirmó que “los cierres pueden traer muchas cosas buenas” y sugirió que aprovecharía la pausa para “deshacerse de muchas cosas que no” querían, “y que serían cosas de los demócratas”.
El líder de la minoría en la Cámara de Representantes, Hakeem Jeffries, ha dicho que los demócratas “no se dejarán intimidar” por las amenazas de la Administración Trump de despedir a más empleados federales si el Gobierno cierra. Ha dicho que su mensaje a Russell Vought, director de la OMB, fue sencillo: “Lárgate”.
Dos importantes sindicatos de empleados federales demandaron el martes a la Administración Trump, acusándola de amenazar ilegalmente con despidos masivos durante un cierre.
¿Qué sucede cuando el Gobierno cierra?
En caso de un cierre total o parcial del gobierno, cientos de miles de trabajadores federales pueden ser suspendidos u obligados a trabajar sin sueldo. Aproximadamente 750.000 empleados federales serán suspendidos cada día que dure el cierre, según una estimación de la oficina presupuestaria del Congreso publicada el martes.
Las operaciones consideradas esenciales, como la seguridad social, Medicare, las funciones militares, la aplicación de las leyes de inmigración y el control del tráfico aéreo, continúan, pero otros servicios podrían verse interrumpidos o retrasados. El reparto de correspondencia y las operaciones de las oficinas de correos siguen sin interrupción.
Las agencias han publicado planes de contingencia actualizados en caso de cierre. El Departamento de Educación dijo que casi todos sus empleados federales serían suspendidos, mientras que la mayor parte de la plantilla del Departamento de Seguridad Nacional seguiría trabajando.
Según un plan de contingencia del Departamento del Interior publicado a última hora del martes por la noche, los parques nacionales permanecerán parcialmente abiertos. “Las carreteras, miradores, senderos y monumentos al aire libre de los parques seguirán siendo accesibles para los visitantes”, afirma.
Durante el cierre del Gobierno en 2019, los parques nacionales informaron de basura, escasez de personal e incluso tres muertes como consecuencia de la crisis financiera.
El impactopuede ser de gran alcance y potencialmente duradero. Los cierres anteriores han interrumpido el turismo a los parques nacionales y a los museos Smithsonian de Washington, ralentizado los viajes aéreos, retrasado las inspecciones de seguridad alimentaria y pospuesto las audiencias de inmigración.
Aunque es posible que la economía en general no sienta los efectos de inmediato, los analistas advierten de que un cierre prolongado podría ralentizar el crecimiento, perturbar los mercados y erosionar la confianza del público.