El Supremo condena a Antonio de Felipe a reconocer que Fumiko Negishi es coautora de 221 de sus cuadros

El Supremo condena a Antonio de Felipe a reconocer que Fumiko Negishi es coautora de 221 de sus cuadros

El tribunal confirma que su antigua ayudante también participó en la elaboración de esas obras y obliga al artista a pagar un anuncio en una revista especializada de tirada nacional que explique que todos esos cuadros no eran solo suyos

Archivo – El artista Antonio de Felipe, condenado a reconocer que no es el único autor de sus cuadros

El Tribunal Supremo ha zanjado la pelea entre el artista español Antonio de Felipe y su antigua ayudante y también artista Fumiko Negishi. Los jueces han establecido que 221 cuadros atribuidos al primero también son obra de Negishi, confirmando que De Felipe tiene que comunicar a todos los compradores que la artista japonesa también es coautora de las mismas. La condena incluye la obligación del artista de pagar y publicar un anuncio sobre esto en una revista del sector y con difusión nacional reconociendo que esas 221 pinturas también son de Negishi.

El artista valenciano y la artista japonesa colaboraron desde 2006 hasta 2016, cuando fue despedida. Según relató a los jueces, vivía en una habitación al fondo del estudio donde, día tras día, trabajaba con Antonio de Felipe, ya por entonces reconocido dentro de la corriente del “pop art”. La entonces ayudante pintaba siguiendo indicaciones del artista pero “quien procedía a la ejecución personal de la pintura del cuadro, plasmando en imágenes lo planeado, era Negishi, aunque De Felipe incluía también, según el caso, de su propia mano, líneas, manchas o grafismos de diversas formas”.

La artista japonesa llevó su caso a los tribunales un año después de ser despedida y reclamó la autoría de 221 obras de De Felipe. En un primer momento un juzgado entendió que entre ambos existía una relación de jerarquía y que, por tanto, ella no podía ser considerada autora de esos cuadros. La Audiencia de Madrid terminó dando la razón a Negishi, reconociendo el “papel primordial” de De Felipe en su obra pero atribuyendo también un “rol relevantísimo” a la “expresión artística propia” de su entonces ayudante, artista hoy reconocida y premiada en Japón. Esa sentencia, ahora confirmada, habló de una “simbiosis artística”.

“No se trata de entender que cualquier ayudante técnico (de taller) pueda considerarse autor de una obra”, explica el Supremo. Pero en este caso, añade, era la artista Negishi quien “en la soledad del taller era capaz de plasmar en el cuadro las ideas o bocetos y, aun cuando recibiera indicaciones o instrucciones, ello implica tomar decisiones y plasmar su personalidad en cada cuadro”.

La firmeza de esta condena por la vía civil implica que Antonio de Felipe debe reconocer la coautoría de su antigua ayudante en 221 obras pictóricas. Desde “Retrato de un hijo de don Mariano Rajoy Brey” hasta “Salvar al soldado Chaplin”, se lo debe hacer saber a los compradores de sus cuadros y lo tiene que publicar en un anuncio, que pagará de su bolsillo, a publicar en “una revista del sector del arte de difusión nacional”.