Cómo contar la historia de la literatura española en vídeos virales de Instagram
El escritor y docente Nando López triunfa en redes sociales con sus reels en los que mezcla la cultura popular y los datos sobre autores españoles
El original inédito de ‘La colmena’ que Cela envió a la censura en 1946 aparece en un archivo de Madrid
Desde hace semanas, es habitual ver compartidos reiteradamente los reels de la cuenta ‘Pequeña historia de la literatura’ en Instagram. Son vídeos donde se usa como percha un momento cumbre de la cultura popular reciente, o una actuación musical, o una declaración política y accidentada de Mariano Rajoy, para trasladar citas, datos y conceptos básicos de la historia de la literatura española.
Por ejemplo, en uno de los más exitosos, que ha sido visto por más de 1,9 millones de personas, se recurre a un vídeo viral del futbolista del Sporting de Gijón Iván Cuellar de 2016 que se hizo famoso porque le decía a un periodista: “Permíteme el lujo de decirte que eres un idiota. No es un insulto, es un adjetivo calificativo”. El texto que lo acompaña dice: “Juan de Valdés explicándonos cómo usar un lenguaje natural, llano y directo en su Diálogo de la lengua”.
El truco consiste en unir dos elementos que, a priori, no tienen nada que ver para provocar sorpresa, interés y, sobre todo, gracia. Así, el Aserejé se convierte en un poema dadaísta, o Belén Esteban se usa para hablar de La casa de Bernarda Alba. Su mítico “Nada es lo que parece” en GH VIP se convierte en una frase para contar algo sobre El Quijote. A Miguel de Cervantes le ha tocado ser bastante protagonista. El interés en su figura despertado por El cautivo, la película de Alejandro Amenábar donde se aborda su posible homosexualidad, ha sido utilizado por la cuenta para realizar varios reels virales a ritmo de Pastora Soler cantando “Cosas buenas tiene Hassan en los jardines de palacio” o de Gloria Trevi y su Y todos me miran.
Detrás de la cuenta se encuentra el escritor y docente Nando López, autor de libros como La edad de la ira, adaptado a serie por Atresmedia. La cuenta nació como una forma de promocionar el disco del mismo nombre, Pequeña historia de la literatura española (Espasa), que sale al mercado el 12 de noviembre, donde ha realizado esa labor de una forma “rigurosa” pero también “divertida de leer”. Quería que no fuera el típico libro de datos sobre nuestros escritores y libros más importantes, sino que hubiera humor, y ese espíritu se quedó dentro de él, que decidió que esa energía podía “trasladarse al mundo de los memes y crear una cuenta paralela al libro, pero originalmente pensada para anunciar su lanzamiento”.
“La creé en verano, en un momento además donde pensaba que las redes son muy tóxicas y que estaría bien tener una cuenta de humor literario y que tuviera que ver con el libro. Así ver también un poco cómo respondía la gente a la que pudiera hacerle gracia a ese tipo de memes y de creaciones”, cuenta Nando López, que confiesa que le ha sorprendido la respuesta a la cuenta de Instagram, donde en dos meses supera los 21.200 seguidores.
Me parece muy bonito poder abordar nuestra maravillosa tradición literaria desde el humor
Ahora ya no es solo una cuenta de promoción, sino que ha decidido que la va a mantener creando más contenido más allá de la publicación del libro. Su idea es que se convierta en “un lugar en el que compartir, ya no solo chistes o bromas sobre la historia de la literatura, que no dejan de ser invitaciones a leer esos libros, sino también fragmentos de entrevistas”, dice, y pone de ejemplo el éxito del reel en el que ha compartido unos pequeños trozos de declaraciones de Maruja Mallo o Gloria Fuertes. “Creo que hay una posibilidad bonita de divulgación desde el humor”, asegura con optimismo.
Aunque la voluntad de la cuenta sea la divulgación, el riesgo es que acabara siendo una cuenta de nicho. Café para los muy cafeteros, aquellos que entienden las bromas y disfrutan compartiéndolas. Nando López tiene ejemplos concretos que acreditan que no es así. “Estoy recibiendo mensajes de gente que me manda fotos de los libros de los que hablo para decirme que los ha cogido en su biblioteca, donde estaban abandonados desde que hizo la secundaria y que los va a releer. Esto me parece maravilloso”, asevera.
Para mostrar que es cierto enseña un mensaje de un joven que le dice que está leyendo El Quijote gracias a sus reels. Eso es otra cosa que le ha sorprendido, “el perfil tan joven de muchos de los seguidores”. Esos jóvenes que han servido también de correa de transmisión haciendo que la cuente llegue a otros sitios: “Me han escrito profesores de literatura diciendo que han conocido la cuenta porque sus alumnos se la han enseñado diciendo que les iba a encantar. Tengo una cuenta que tiene muchos seguidores adolescentes, y yo creo mucho en el humor como una fuente de divulgación. Yo he ejercido de profesor en secundaria. Estuve diez años. Este año empecé a dar clases en la universidad. Y yo, desde la docencia, siempre utilizaba el humor como una herramienta didáctica. Porque cuando tú te lo pasas bien, aprendes más. Cuando te ríes, aprendes más. Y esa cuenta va un poco volcada en eso”.
Cada noticia vale para hacer llegar un libro. La llegada de Rosalía a la Gran Vía le sirvió para contar quiénes eran Adela y Pepe el Romano. A priori, hay que conocer a Lorca para entender la referencia, pero también muchos buscarán esos nombres para entender la referencia y la misión estará cumplida. “Me parece muy bonito poder abordar nuestra maravillosa tradición literaria desde el humor, que es un poco lo que he intentado hacer con el libro, que además tiene unas ilustraciones de Luis Doyague”, subraya.
El ideal sería romper “el lado más rancio y arqueológico que se tiene con la literatura clásica” y demostrar que “los clásicos son clásicos porque están vivos y hablando de cosas que siguen afectando a la gente”. El uso del humor tiene también mucho que ver con la propia historia de la literatura española. “Nuestra historia literaria tiene dos grandes ejes. Uno es el humor y otro son los antihéroes. Y a veces se nos olvida que nuestro gran clásico, El Quijote, es un libro de humor. Y, sin embargo, a veces perdemos el punto de vista con una solemnidad que niega ese maravilloso humor absolutamente humanista de nuestra propia literatura y nuestros grandes autores”, critica. Por todo ello, la cuenta va a seguir más allá del libro. Porque Nando López se divierte haciéndolo, porque cumple su función, y porque como confiesa emocionado, se despierta con una sonrisa en la boca cuando los jóvenes le mandan mensajes confesando que han empezado un libro.