El dueño del Ventorro dice a la jueza que Mazón y Vilaplana se fueron los últimos en la dana, entre las 18.30 y las 19.00

El dueño del Ventorro dice a la jueza que Mazón y Vilaplana se fueron los últimos en la dana, entre las 18.30 y las 19.00

El testigo asegura que no escuchó las llamadas del president y que los comensales salieron solos y sin escoltas

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El dueño del restaurante El Ventorro, Alfredo Romero, ha confirmado este viernes ante la jueza de la dana que el president Carlos Mazón y la periodista Maribel Vilaplana abandonaron el establecimiento el día de la dana entre las 18.30 y las 19.00 “aproximadamente”. El testigo asegura que no fue más tarde de las 19.00 y, “como muy pronto”, a las 18.25.

El restaurador recuerda que sus trabajadores se van a las 18.10. Romero se puso a trabajar con papeleo de facturas y “luego pues se fueron”. Ambos se fueron “solos”, según Romero, que los acompañó hasta la cancela del establecimiento situado en la céntrica calle de Bonaire de València. A preguntas de una de las acusaciones populares, ha asegurado que no vio a Mazón preocupado ni observó que tuviera prisa al salir.

La comida acabó a las 16.45 aproximadamente, según ha dicho. Los comensales alargaron un par de horas más. A las 18.15 del 29 de octubre de 2024, según ha confirmado, ya no le quedaban clientes en el establecimiento. El propietario del restaurante mandó a dos de sus trabajadores, que eran de las zonas afectadas por las lluvias, a casa.

Romero atendió personalmente a Mazón y Vilaplana, que compartían mesa en un reservado. El testigo ha confirmado, a preguntas de la jueza instructora, que no escuchó ninguna de las llamadas que hizo o recibió el jefe del Consell. Entró al reservado unas siete u ocho veces.

El restaurador también ha aclarado que los escoltas de Mazón no estaban en el restaurante. El president llegó poco antes que la otra comensal, según ha declarado. Vestido con chaqueta “oscura” y cargado con un mochila “pequeñita”, según ha especificado.

Cuando, un poco más tarde, llegó Vilaplana, fue acompañada hasta el reservado del piso superior del establecimiento, en el que hay problemas de cobertura con las compañías Orange y Vodafone (no con Movistar).

La comida fue facturada luego al PP

Por otro lado, ha dicho que alguien de la Generalitat reservó la mesa para Carlos Mazón unos tres días antes de la polémica comida, que se celebró en un reservado del restaurante. También ha aclarado que el reservado no se puede cerrar del todo.

Además, el testigo ha asegurado que envió la factura escaneada “al Partido Popular”. Alfredo Romero también ha explicado que emitió una factura (“al día siguiente o dos días después”) y no un ticket, por lo que no se puede establecer la hora exacta de salida del establecimiento.

Al hacer la reserva, ya se le advirtió de que se debía facturar el ágape al PP, según ha declarado Romero. La comida fue pagada mediante transferencia.