Vitoria declara la guerra a Starbucks: más de un año operando sin licencia y la posibilidad de que la Policía lo clausure

La plaza de la Virgen Blanca es el salón de estar de Vitoria. Esta Navidad se ha instalado una gran noria gigante y un carrusel de hechuras antiguas. En un rincón, el conocido como Mentirón, dispone de unas vistas privilegiadas de la postal el local de Starbucks. La cadena instaló allí su cafetería en octubre de 2024, la primera en la ciudad y que sustituyó a un negocio de toda la vida. Pero han sido trece meses con todo tipo de infracciones. “Esto está siendo una auténtica tomadura de pelo”, admite el Ayuntamiento, que ha llegado a poner por escrito que podría enviar a la Policía a clausurar el establecimiento.

Esta semana, en una comisión municipal, la oposición de izquierdas, EH Bildu y Elkarrekin, han preguntado al Gobierno municipal por la gestión de este asunto. El edil abertzale Ekaitz Díaz de Garayo ha ironizado que la multinacional “lleva un año delante de las narices del Ayuntamiento”, que está a unos pocos metros caminando, operando sin licencia. “O lo corrigen inmediatamente o se clausura inmediatamente”, urgió también el concejal de Equo y de la coalición Elkarrekin Óscar Fernández.

Desde el Gobierno local, el socialista Borja Rodríguez ha explicado que Starbucks se ha valido de la figura de la “comunicación previa” para estar abierto. Se trata de un trámite que permite abrir mientras se van realizando los papeleos requeridos. El problema es que nunca han atendido los requerimientos municipales. Y el proceso se ha reiniciado tres veces. “Están jugando con el derecho administrativo. Está siendo una auténtica tomadura de pelo”, asumió Rodríguez sobre la cadena estadounidense, que tiene sobre la mesa un expediente sancionador por ejercer una actividad sin título habilitante

EH Bildu ironiza que una compañía con “38.000 locales” en el mundo es perfectamente capaz de hacer el papeleo en Vitoria y sostiene que el Ayuntamiento ha operado con “pasividad y permisividad” por permitir que se haya alargado trece meses este conflicto. “El mensaje que se da es que se pueden abrir negocios sin cumplir la normativa”, sostiene Díaz de Garayo. “Hay que pasar de las palabras a los hechos”, reclama también Elkarrekin, que asegura que está siendo un año largo de “dimes y diretes” de los responsables de Starbucks y los funcionarios locales.

Desde la empresa, indican que “Starbucks ha abierto su tienda de Vitoria dentro del marco legal y conforme a las licencias requeridas”. “Dentro del proceso de licitación, Starbucks presentó correctamente la declaración responsable que evalúa distintos parámetros establecidos por el Ayuntamiento. Tras su presentación, el Ayuntamiento solicitó una ampliación por la cual había que poner en marcha nuevas mediciones de ruido. Este proceso de medición se demoró más de lo deseado por razones ajenas a Starbucks. A día de hoy esas mediciones ya se han llevado a cabo y se está trabajando con el Ayuntamiento en la presentación del informe afín”, exponen. Y agregan que “en ningún momento la marca ha recibido ninguna notificación por expediente de suspensión de actividad ni ninguna sanción y está en constante contacto con el Ayuntamiento para facilitar toda la documentación solicitada adicionalmente al proceso inicial”.