Trump se revuelve cuando se le pregunta por su salud: «No tengo ni idea de qué parte del cuerpo fue la resonancia, pero de la cabeza no fue»
El presidente de EEUU comunicó a principios de noviembre que se había sometido a una prueba diagnóstica de la que cuatro semanas después no ha informado ni de los resultados ni de la parte del cuerpo que se sometió a examen
“¿Eres estúpida?”: La furiosa respuesta de Trump a una periodista que preguntaba por el tiroteo cerca de la Casa Blanca
“No tengo ni idea”. Así, airado, ha respondido este domingo a las periodistas que le han preguntado por la resonancia magnética que se hizo el presidente de EEUU hace varias semanas. “Solo fue una resonancia magnética. ¿De qué parte del cuerpo? No fue el cerebro. Porque hice una prueba cognitiva y la aprobé con nota. Saqué una nota perfecta, algo que tú serías incapaz de hacer”.
Con esa reacción de enfado ha dado por concluida la conversación con los periodistas en el Air Force One, en el vuelo de vuelta desde Florida a Washington DC.
“Si quieren que se publiquen los resultados, lo haré”, dijo el presidente durante una conversación con los periodistas mientras regresaba a Washington desde Florida.
Trump, además, dijo que los resultados de la resonancia magnética eran “perfectos”, si bien no supo explicar de qué parte del cuerpo es la prueba.
Hasta ahora, la Casa Blanca se ha negado a dar detalles sobre por qué Trump se sometió a una resonancia magnética durante una revisión el mes pasado, o en qué parte de su cuerpo.
La secretaria de prensa, Karoline Leavitt, ha dicho que el presidente se sometió a “imágenes avanzadas” en el Centro Médico Militar Nacional Walter Reed “como parte de su examen físico de rutina” y que los resultados mostraron que Trump sigue gozando de una “salud física excepcional”.
Trump añadió este domingo que “no tiene ni idea” de en qué parte de su cuerpo se le realizó la resonancia magnética.
La polémica en torno a la resonancia magnética ha recobrado vida estos últimos días a raíz de que el presidente de EEUU llamara “retrasado” al gobernador de Minnesota, Tim Walz, ex candidato a vicepresidente de Kamala Harris. Walz ha respondido afirmando que “el presidente no está bien” y reclamando la publicación de los resultados de la resonancia magnética.
Todo esto se produce en un contexto en el que Trump insulta cada día a Joe Biden por un supuesto deterioro cognitivo que le impedía presidir el país, por lo que, según su teoría, gobernaba su equipo por medio del autopen –boli automático con la firma del presidente–. Y, mientras acusa a la prensa de no haber hecho su trabajo de denuncia del deterioro en la salud de Biden, Trump protesta cuando se le pregunta por la suya, insulta a la periodista que le pregunta por la resonancia –“tú serías incapaz de sacar esa nota en el test”– y, también, a la que escribió un artículo en el New York Times sobre su bajón físico, a la que llamó “fea”.